Aunque la grasa siempre es algo que queremos eliminar de nuestro cuerpo para lucir más delgados(as), puede tener un uso que contribuye a tu belleza y calidad de vida: mejorar la apariencia de las cicatrices difíciles de tratar. Aquí te cuento cómo.
Muchas personas en el mundo sufren porque tienen cicatrices que han sido difíciles de tratar producto de quemaduras, cirugías (como reconstrucción de seno) o accidentes graves. Además de gastar mucho dinero en medicamentos para aliviar su dolor e incomodidad, las personas con cicatrices grandes difíciles de tratar sufren de autoestima baja y en ocasiones, el hecho de tener una cicatriz grande les impide funcionar bien en sus actividades diarias. Incluso, algunos recurren a medicamentos para el dolor que pueden resultar adictivos.
Pero gracias a la ciencia y sus avances, un nuevo método permite que las cicatrices puedan tratarse con efectividad. Se trata de inyectarle al paciente sus mismas células grasas.
Un estudio al respecto realizado por unos cirujanos italianos de la Universidad de Milán y publicado en la revista The Journal of Craniofacial Surgery, demostró los buenos resultados en cientos de pacientes con cicatrices difíciles de tratar, y que además causan dolor y limitan la movilidad. El hecho de inyectar células grasas del paciente ha probado ser una fórmula efectiva para reparar el daño en los tejidos.
Durante un período de seis años 700 pacientes recibieron inyecciones de sus propios tejidos grasos. Todos los pacientes tenían cicatrices rígidas que no habían mejorado con otros tratamientos. El procedimiento se hace mediante liposucción para extraer pequeñas cantidades de grasa (por lo general del abdomen o las caderas). Luego, se inyecta la grasa debajo de la piel donde se encuentra la cicatriz.
Los resultados fueron excelentes, pues se presentó una mejoría significativa desde el punto de vista estético y funcional. Según los autores del estudio, luego de la inyección de grasa, las cicatrices se volvieron más suaves y flexibles, incluso, mejoraron su color, que en varios casos era bastante similar al color natural de la piel.
Así mismo, se vio una mejoría en la movilidad en el área afectada.
La razón por la cual inyectar grasa es beneficiosa para las cicatrices, no queda clara. Se cree que se debe a que el tejido graso contiene células madre que pueden convertirse en distintos tipos de células que juegan un papel importante en la reparación de los tejidos.
De cualquier modo, aunque la razón no está clara, no queda ninguna duda de que este tratamiento con inyección de grasa es una excelente alternativa para tratar las cicatrices de manera eficaz. Esta es una excelente noticia para quienes han sufrido durante mucho tiempo por la apariencia de sus cicatrices y la dificultad en el movimiento debido a ellas.
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