Hay ciertas cosas que te ayudan a determinar cuál es el mejor doctor para ti. Si te gusta un médico cálido que te dedique tiempo en vez de pasársela pegado a la computadora. Si te gusta un médico autoritario que toma las decisiones por ti, o una que comparte la información y junto contigo toma las decisiones. Pero esta columna se trata de cómo tú puedes ser un mejor paciente, independientemente del médico al que visites. Se logra, preparando tu visita al doctor…
Para que salgas satisfecho de tu visita con tu médico debes de prepararte con anticipación. Hoy en día la mayoría de las veces, tendrás la oportunidad de pasar entre 10 a 20 minutos con el doctor y si no te organizas y te preparas, desaprovecharás mucho de ese tiempo o quizá no llegues a preguntar todo lo que querías, no se te ocurra nada que preguntar en ese momento, preguntes lo que era menos importante o hasta se te olvide preguntarla razón principal por lo que ibas si estabas muy nervioso.
A continuación, encontrarás 7 recomendaciones para ayudar a que tu visita al doctor sea rendidora y eficiente:
1. Antes de tu visita al doctor, anota:
- tus preguntas en orden de prioridad.
- las medicinas que tomas (incluyendo las que se venden sin receta, las hierbas y los suplementos). Es importante que incluyas la dosis de cada medicina y cómo la tomas.
- las enfermedades que has tenido (incluyendo hospitalizaciones).
- las cirugías que te han hecho.
- las enfermedades que tienen o han tenido tus familiares cercanos.
- a qué eres alérgico.
Lleva contigo las listas para que puedas compartirlas con tu médico cuando te pregunte, e incluso se las puedes dar si deseas.
Llevar una bolsa a tu visita al doctor con las medicinas puede ser útil pero toma más tiempo revisar cada botellita en vez de ver una lista que está bien hecha y se puede leer fácilmente. Recuerda que es la lista de los medicamentos que tomas (no los que te recetaron pero que no estás tomando). Puedes tener otra lista para esos.
2. Anota tus síntomas y compártelos con tu médico
Comparte con tu médico la razón de tu visita y tus síntomas. Obviamente hay visitas al doctor para chequeos anuales. Pero podría haber cosas que te preocupan que si no las compartes con tu doctor o doctora, él o ella no podrán ayudarte a que los resuelvas.
3. Sé honesto
Es importante que le digas a tu médico si fumas o no (incluyendo marihuana), si tomas bebidas alcohólicas y cuánto, si usas drogas. Es importante que le digas si no has estado tomando tus medicinas regularmente, si has estado comiendo comida chatarra y si no has hecho ejercicio. Si podrías haber estado expuesto a una enfermedad de transmisión sexual. Todo esto tiene un impacto en tu salud. Si no le dices la verdad durante tu visita al doctor, tu médico no te puede ayudar de la mejor forma porque no le estás dando la información que necesita.
4. Toma notas durante la visita
Vale la pena anotar algunos puntos importantes que te recomiende tu médico. Los estudios demuestran que los pacientes con frecuencia se olvidan de mucha de la información que les proporciona el médico durante la visita tan pronto salen. El doctor puede escribir algunas cosas pero el paciente tiende a entender lo que ellos escriben mejor que lo que escribe el doctor.
5. Ve a tu cita con un amigo o un familiar
Ir acompañado es especialmente importante si esperas recibir noticias que podrían ser difíciles (por ejemplo, que pueda tratarse de un cáncer) o que tengas dudas de que no vayas a entender bien o que no vayas a recordar los detalles. Mucha gente deja de oír lo que el doctor dice una vez que le dicen que tiene cáncer. Tener a otra persona presente para escuchar lo demás es muy útil. También es útil cuando se trata de una persona de la tercera edad que no tiene buena memoria. La información durante la visita al doctor es importante para mantener y prolongar la salud.
6. Haz preguntas
Si tienes dudas, haz preguntas. Que no te de pena. Se trata de tu salud y es importante que entiendas qué tienes y si te recetan algo, para qué es, cuánto tiempo lo tienes que tomar, si tiene efectos secundarios, cuáles son, cuánto tiempo lo deberás tomar, cuando debes regresar a la siguiente visita y cuál es el pronóstico de lo que tienes.
Se realista y si el médico te dice que debes de hacer algo como cierto tipo de ejercicio o por “X” tiempo, y tú piensas que no es algo que puedes lograr, habla con tu médico al respecto. De otra forma, él o ella va a esperar que lo hagas, no lo vas a poder hacer y tú vas a estar frustrado.
7. Trata de relajarte
Es común estar nerviosos cuando se va al médico porque frecuentemente la persona se preocupa que el doctor vaya a encontrar “algo malo”. Pero, la mayoría de las veces, es para chequeos, para prevenir problemas, para el seguimiento de condiciones conocidas y no tiene que ser doloroso ni una experiencia negativa. Por el contrario, puede ser una experiencia positiva. Los médicos estamos para ayudarte. La próxima vez que vayas a tu visita al doctor, procura respirar profundo un par de veces y relájate.
Si te preparas con anterioridad, tu visita será más eficiente, te sentirás menos estresado y te sentirás más satisfecho.
Obviamente, diferentes doctores tienen diferentes estilos. Si tienes oportunidad, selecciona a un médico que no sólo sea un buen profesional sino con quien tengas una buena relación. Si no tienes una buena relación con él o ella, ve si puedes seleccionar a otro u otra doctora. Y, si vives en Estados Unidos, recuerda que este es el momento ideal de aprovechar para visitar a tu médico para hacerte los estudios preventivos (como la mamografía, la colonoscopía, el examen pélvico y el Papanicolau, etc.- de acuerdo a tu edad y sexo) y de recibir las vacunas como la de la influenza o gripe, entre otras. Estos servicios están cubiertos por la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Costo (o ACA) y por Medicaid. No sabemos qué va a pasar en un futuro. No sólo eso, también tienes acceso a servicios de salud mental, para la vista y en muchos casos ¡hasta para la salud dental! Como mencioné anteriormente, en este momento estos servicios están cubiertos. Como dice el dicho: “Más vale pájaro en mano que ver un ciento volar”.
Si eres ciudadano y calificas, aprovecha afortunadamente aún no se ha revocado esta ley, así que si vives en Estados Unidos, quizá podrías calificar con las opciones de cobertura médica para personas de bajos ingresos para Medi-Cal o Medicaid. Obtén información en una agencia de departamentos humanos de tu localidad. Si vives en California puedes obtener información en www.CoveredCalifornia.com/es, en el resto del país visita https://www.cuidadodesalud.gov/es/.
También puedes visitar el intercambio de seguros médicos de tu estado. En California puedes ir a www.CoveredCA.com/es o llamar al 1-800-300-0213. Los centros comunitarios de salud en tu comunidad podrían ayudarte a tener acceso a servicios médicos si no calificas para un programa de cobertura de salud, en California podrías encontrar un centro de salud en www.californiahealthplus.com.
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