Unos científicos en Taiwán encontraron que los antibióticos del grupo al que pertenecen las fluoroquinolonas, como los que se venden bajo las marcas Cipro y Avelox, podrían causar variaciones significativas en los niveles de la glucosa en los pacientes diabéticos. Si tienes diabetes, tienes que estar al tanto, ya que podría ser importante en la selección del antibiótico para tratar una infección en tu caso.
Todas las personas que padecen de diabetes saben que deben controlar sus niveles de glucosa en la sangre, pues de lo contrario pueden sufrir complicaciones más o menos severas, ya sea que ese nivel de glucosa sea demasiado alto (lo que se conoce como hiperglucemia o hiperglicemia) o demasiado bajo (lo que se llama hipoglucemia o hipoglicemia).
Al mismo tiempo, los médicos saben que ciertos medicamentos pueden hacer que los niveles de la glucosa en la sangre varíen, y por eso lo tienen en cuenta antes de recetárselos a los pacientes con diabetes.
Al respecto, un estudio publicado en Clinical Infectious Diseases agrega un grupo de antibióticos a esta lista de medicamentos que se deben de recetar con precaución. Se trata de las denominadas fluoroquinolonas, que incluyen la ciprofloxacina, la moxifloxacina y la levofloxacina -y que se venden bajo las marcas comerciales Cipro, Avelox y Levaquin-, ya que han provocado variaciones significativas en los niveles de la glucosa de los pacientes diabéticos, tanto elevándolos como disminuyéndolos.
Para llegar a estos resultados, los investigadores de la Universidad Nacional de Taiwán, en Taipéi, analizaron la información de más de 78 mil diabéticos incluida en la base de datos del Programa del Seguro Nacional de Taiwán. Entre ellos identificaron a quienes les habían recetado algún tipo de antibiótico, que podía ser de cualquiera de estas tres clases: fluoroquinolonas, macrólidos (como claritromicina o azitromicina) y cefalosporinas de segunda generación (como cefuroxime, cefaclor y cefprozil).
Tras evaluar los datos recopilados, los investigadores encontraron que, durante los 23 meses que duró el estudio, hubo más de 28 mil diabéticos a los que se les recetaron fluoroquinolonas (en detalle: a 12,564 se les recetó ciprofloxacina, 4,221 usaron moxifloxacina y 11,766 recibieron levofloxacina). También encontraron más de 20 mil usuarios de cefalosporinas y casi 30 mil de macrólidos.
Entre esos pacientes, durante los primeros 30 días luego de las recibir las recetas, los registros muestran que 215 tuvieron episodios de hiperglicemia y 425 de hipoglicemia. Entre ellos, el riesgo absoluto de sufrir esas variaciones siempre fue mayor entre quienes usaron antibióticos del grupo de las fluoroquinolonas, y dentro de este tipo de medicamentos, el que mayores episodios provocó fue la moxifloxacina.
O sea, la incidencia de hiperglicemia por cada mil personas fue de 6.9 entre quienes tomaban moxifloxacina, 3.9 para quienes tomaban levofloxacina y 4 entre los que usaban ciprofloxacina, mientras que los casos de hipoglucemia fueron 10 por cada mil personas que tomaban moxifloxacina, 9.3 entre quienes usaban levofloxacina y 7.9 para quienes tomaban ciprofloxacina.
Por otro lado, la incidencia de hiperglicemia por cada mil personas fue de 1.6 entre quienes usaban macrólidos y 2.1 para quienes tomaban cefalosporinas, mientras que los eventos de hipoglucemia por cada mil personas fue de 3.7 para quienes tomaban macrólidos y 3.2 entre los que usaban cefalosporinas.
Si bien el riesgo detectado fue bajo, los investigadores sugieren que los médicos lo tengan en cuenta cuando necesiten recetar antibióticos a las personas con diabetes. Además, las fluoroquinolonas ya se habían asociado a episodios de hiperglucemia e hipoglucemia (de hecho, un medicamento de este grupo denominado gatifloxacina — que se vendía con la marca Tequin — se retiró del mercado en Estados Unidos porque se había asociado a efectos adversos severos ocasionales que afectaban el sistema cardiovascular, musculo-esquelético, endócrino, renal y nervioso central. Esta medicina también afectaba los niveles de glucosa en la sangre).
Los investigadores advirtieron que el análisis se desarrolló basado en datos electrónicos y por eso faltan datos de laboratorio, y que no prueban que los antibióticos causen esas fluctuaciones en los niveles de la glucosa en la sangre, sin embargo, que parece que existe una relación entre ambos hechos.
Además, hay otros factores que también pueden provocar variaciones en los niveles de la glucosa en la sangre, como el tipo de diabetes y el tratamiento que reciben los pacientes, así como si padecen de enfermedades renales o infecciones severas.
Recuerda que actualmente existen distintos métodos para que puedas controlar tu nivel de glucosa en la sangre y que llevar una dieta adecuada y una rutina de ejercicios puede ayudarte a mantener tu diabetes bajo control y evitar las complicaciones que puede provocarte la diabetes. El tener precaución a la hora de tomar medicamentos, también es fundamental. No dudes en preguntarle a tu médico los posibles efectos secundarios, incluyendo en tu nivel de glucosa en la sangre de cualquier medicamento que te recete.
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