Las alteraciones en el colon por la presencia de divertículos son muy comunes. Especialmente en la población de adultos mayores. Aunque a menudo se utilizan como si fueran sinónimos, la diverticulosis y diverticulitis son distintos, aunque parten de una misma situación: la formación de pequeños sacos o bolsas en la pared intestinal.
La diverticulosis ocurre al formarse pequeñas bolsas (divertículos) en la pared del intestino. Y, la diverticulitis es una complicación de esta condición: una inflamación o infección de dichos divertículos.
Comprendiendo qué son los divertículos y cómo se forma la diverticulosis
Los divertículos se desarrollan en áreas debilitadas, especialmente en el intestino grueso. Es usual que sean donde hay mayor presencia los vasos sanguíneos. Su aparición suele ocurrir al tener una dieta baja en fibra, ser sedentario o simplemente por el envejecimiento.
Se piensa que cerca del 70% de los adultos mayores de 80 años pueden tener diverticulosis sin presentar síntomas. Este hallazgo suele surgir durante colonoscopias o estudios por imágenes realizados como diagnóstico.
Te recomendamos revisar más sobre la importancia de la fibra en el intestino en este artículo de Vida y Salud sobre la dieta saludable.
¿Qué es la diverticulitis y cómo se diferencia de la diverticulosis?
Aquí es donde muchos se preguntan nuevamente: ¿diverticulosis es lo mismo que diverticulitis? La realidad es que la diverticulitis implica una inflamación o infección activa. Aparece solo en un pequeño porcentaje de personas con diverticulosis (alrededor del 5%).
Los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor abdominal, típicamente en el lado inferior izquierdo
- Náuseas, vómitos, fiebre
- Estreñimiento o diarrea
“El dolor puede ser tan súbito que algunos pacientes llegan a urgencias creyendo tener apendicitis, pero del lado opuesto del abdomen”, comenta la Dra. Lilia Salgado, gastroenteróloga cubana.
Tipos de diverticulitis: ¿cuándo preocuparse?
Existen dos formas principales:
Diverticulitis simple: No presenta complicaciones graves. Se maneja desde la casa.
Diverticulitis complicada: Puede requerir cirugía urgente. Las complicaciones pueden incluir:
- Abscesos o aparición de pus
- Perforación del colon u otra zona del sistema digestivo
- Obstrucción intestinal
- Sangrado y sepsis
Factores de riesgo de diverticulosis y diverticulitis
Entre los factores clave destacan:
- Dieta baja en fibra: Consumir 25-30 gramos diarios a través de frutas, verduras, cereales integrales y legumbres. La fibra ayuda a mantener las heces blandas y voluminosas, lo que reduce la presión en el colon.
- Hidratación insuficiente: Beber suficiente agua facilita el tránsito intestinal y evita la formación de heces compactas.
- Estilo de vida sedentario: El ejercicio regular promueve el movimiento del intestino y ayuda a prevenir el estreñimiento.
- Obesidad
- Genética y antecedentes familiares
- Una baja microbiota intestinal: Es recomendable consumir alimentos fermentados que ayudan a regular a los microorganismos. Además, esto ayuda a la inflamación y la regulación de sistema inmune.
“El estilo de vida moderno ha influido directamente en el aumento de esta patología. Especialmente en el consumo de carnes rojas y grasas saturadas.”, señala la Dra. Lilia Salgado, gastroenteróloga cubana.
Diagnóstico y tratamiento: Lo que necesitas saber
Ante síntomas sospechosos, se puede solicitar:
- Hemograma completo
- TAC abdominal
- Ecografía (en algunos casos)
Tratamiento para casos leves:
- Dieta líquida
- Antibióticos orales durante 7 a 10 días
- Reposo y analgésicos (evitar los no esteroideos ya que puede aumentar el riesgo de sangrado)
En casos severos:
- Hospitalización
- Antibióticos intravenosos
- Cirugía laparoscópica
Investigaciones y avances futuros en enfermedad diverticular
La investigación sobre la enfermedad diverticular y sus complicaciones continúa avanzando. Por un lado, estudios recientes que han explorado la influencia de la microbiota intestinal y por otro, la genética y el estilo de vida.
- Biomarcadores para predecir complicaciones: Prontamente, será posible identificar el riesgo de desarrollar diverticulitis. Esto podría facilitar intervenciones preventivas tempranas y personalizadas.
- Cirugías menos invasivas: La cirugía laparoscópica y otras técnicas ofrecen opciones menos invasivas y con un tiempo de recuperación más breve.
- Terapia personalizada: La medicina busca adaptar el manejo de las enfermedades a las características individuales de cada paciente. Donde se consideran todos sus factores.
Saber si ¿diverticulosis es lo mismo que diverticulitis? es crucial para comprender los riesgos, síntomas y tratamientos. La prevención y la detección temprana juegan un papel clave. Aunque muchos casos no requieren intervenciones, reconocer las señales de alerta puede marcar la diferencia entre una recuperación rápida y una complicación grave.
Preguntas frecuentes
¿La diverticulosis siempre se convierte en diverticulitis? No. La mayoría de las personas con diverticulosis no desarrollan diverticulitis.
¿Puedo prevenir la aparición de divertículos? Adoptando una dieta alta en fibra y hábitos saludables, puedes reducir significativamente el riesgo.
¿Qué hacer si me diagnostican diverticulosis? Mantén controles regulares con tu médico, mejora tu alimentación y vigila posibles síntomas.
¿Cuándo debo ir al hospital por dolor abdominal? Si el dolor es intenso, acompañado de fiebre o vómitos, busca atención médica de inmediato.
¿La cirugía siempre es necesaria en diverticulitis? No. Solo en casos complicados o cuando el tratamiento conservador falla.
¿Puedo tener una vida normal con diverticulosis? Sí. Con hábitos saludables y seguimiento médico, la mayoría lleva una vida plena.
Por Carlos Diego Ibáñez
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