Cuando se trata de hacer ejercicio, las personas que no están acostumbradas a hacerlo, siempre encuentran una excusa. ¿Cuál es la tuya? En Vida y Salud le damos un vistazo a las cuatro más comunes, que desde que se inventaron, son el escudo de muchos para evitar ejercitarse, aunque sepan que se están perdiendo de innumerables beneficios para la salud. Aquí hablamos de ellas y te invitamos a que las dejes a un lado y hagas del ejercicio un hábito.
“Desde que se inventaron las excusas, todo el mundo queda bien”. Pero cuando se trata de hacer ejercicio, este dicho popular no se aplica. Puedes buscar las mil y una excusas para no ejercitarte, pero al final la única persona perjudicada eres tú. No es saludable. Sin embargo, no es un secreto que hacer ejercicio es uno de los retos más grandes para muchas personas que no incorporan a la actividad física en su rutina. Entre las excusas más comunes que la gente usa para justificar el ser sedentarios están las siguientes:
1. ¡No tengo tiempo!
Es lo primero que dicen muchos. Sin embargo, si les preguntas, sí tuvieron tiempo de ver un programa en la televisión o de hablar por teléfono con sus amigos. Así que para que dejes esta excusa a un lado, te cuento que hacer ejercicio no necesariamente toma demasiado tiempo. Con sólo 30 minutos al día – distribuidos durante el día -, o tres veces a la semana, estás dándole a tu cuerpo beneficios increíbles. Si trabajas todo el día, trata de incorporar el movimiento en tu lugar de trabajo. Camina por la oficina, sube las escaleras en lugar de subir por el ascensor, toma una corta caminata después del almuerzo. Lo mismo sucede en casa. El hacer un poco de jardinería, barrer, o incluso tender la cama cuentan como movimiento. No tienes que seguir una rutina muy estricta para empezar, ¡sólo empieza! Vas a ver que poco a poco harás del ejercicio parte de tu rutina. Así que esta excusa, ya no vale.
2. Estoy muy cansado(a)
Esta excusa tiene que desaparecer de inmediato. Aunque suene contradictorio, el hacer ejercicio precisamente lo combate. El ejercitarte hace que tu cuerpo tenga más energía, pues durante la actividad física se liberan las endorfinas, unas hormonas que te hacen sentir bien. Esto no sucede cuando caes como piedra en el sofá a ver la televisión. Así que si tu problema son el cansancio y la fatiga, muévete y verás que desaparecerán. El hacer ejercicio durante la mañana es ideal para quienes tienen trabajos exigentes. Les da energía y positivismo. Y si prefieres hacerlo luego del trabajo, dormirás como un bebé y te levantarás como nuevo(a). Así que no uses más esa excusa. ¡Nadie te va a creer!
3. Hacer ejercicio me aburre
Si esta es tu excusa, piensa ¿por qué te aburre? Tal vez no has encontrado una actividad que te guste. Según los expertos, el hacer ejercicio debe ser algo que disfrutes tanto como el sexo. Prueba cosas nuevas: si no te gusta ir al gimnasio, ve a trotar al aire libre, anda en bicicleta, camina, baila, participa en algún deporte. Cualquier cosa que te agrade. Considera hacerlo con otras personas si se te hace más fácil. ¿Qué tal si intentas algo nuevo? Esta excusa del aburrimiento va a desaparecer de inmediato. Vas a ver que el ejercicio se va a volver algo tan divertido, algo tuyo, algo que esperas que llegue porque es un regalo para tu bienestar. Hay muchas actividades físicas ¡elije una y pásala bien!
4. Siempre que empiezo a hacer ejercicio, me rindo
Si es así, es porque en realidad, no has intentado hacer algo que te gusta. El empezar a ejercitarte es lo más difícil, así que ¡no te des por vencido! Para mantener la motivación, debes ponerte metas realistas. No puedes renunciar después de una semana porque ves que no tienes un cuerpo súper musculoso o que no has perdido todas las libras que quieres. ¡No es realista! Pero es un gran paso hacia tu meta. Así que poco a poco se llega lejos. Un buen truco es imaginarte con el cuerpo que siempre has querido. Eso te motivará a seguir con tu rutina y hacer del ejercicio, un hábito.
Deja a un lado las excusas, que no son más que auto-engaños. No te pierdas de todas las ventajas que el mantenerte activo(a) le brinda a tu salud. ¡Muévete! Verás que te sentirás mejor y las excusas serán cosa del pasado.
Imagen © iStock / skynesher