La última moda en zapatos para correr es no usarlos, señala la “Mayo Clinic Women’s HealthSource”. Las nuevas investigaciones representan un reto para la sabiduría tradicional sobre los zapatos para correr, diseñados con talones elevados y acolchados que promueven la absorción del impacto.
Las pruebas respecto a que ese diseño evite lesiones al correr son escasas. Algunas investigaciones plantean que los zapatos normales para correr podrían aumentar la posibilidad de lastimarse. Al estudiar la manera como golpea el piso un pie descalzo frente a uno calzado, se ha visto que quienes corren sin zapatos no aterrizan primero sobre el talón y, por ello, evitan algunas fuerzas de alto impacto y las consiguientes lesiones posibles.
Los fabricantes han tomado nota de esto y desarrollan nuevos tipos de zapatos que imitan el movimiento de correr descalzo sobre un piso suave. Los nuevos diseños tienen suelas más flexibles, así como menos elevación y acolchonado que los zapatos para correr tradicionales.
Quienes todavía corren sin nunca haberse lesionado, no es necesario que vayan rápidamente a la tienda a comprar el nuevo estilo de zapatos; pero los corredores que ya han sufrido lastimaduras, bien vale la pena que consideren un diseño diferente de zapato. Por otro lado, un podiatra también puede ofrecer recomendaciones.
Women’s HealthSource ofrece las siguientes sugerencias para que los zapatos calcen bien:
- Adquiéralos en una tienda con buena reputación y especializada en zapatos deportivos.
- Use las medias (los calcetines) adecuadas para correr.
- Compre los zapatos hacia el final del día, cuando los pies están de mayor tamaño.
- Pida que le midan ambos pies mientras esté de pie y pruébese ambos zapatos.
- Escoja aquel zapato que más se asemeje a la forma de su pie y deje que haya un espacio de alrededor del ancho del dedo índice entre la punta y el dedo más largo del pie.
- Evite los zapatos que rozan o aprietan el tobillo o pie y aquellos que se salen.
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