Las bebidas alcohólicas están presentes en muchos momentos gratos de la vida y siempre hay algún motivo para brindar. ¿Pero cómo se sabe si uno domina al alcohol o si es dominado por él?
Carlos, un amigo de muchos años, siempre tenía la costumbre de servirse un trago al llegar a la casa después del trabajo. Con el paso del tiempo, ya no podía irse a dormir sin haberse bebido un par de copas. El alcohol empezó a formar parte de su rutina. Un día se dio cuenta de que tal vez estaba volviéndose dependiente del alcohol, es decir alcohólico. Al principio, no lo quiso admitir, pero después, empezó a preocuparse.
Aunque los hombres son más susceptibles, el alcoholismo es un problema que afecta a todo tipo de personas, independientemente de su edad, género o condición social. En ocasiones, es una máscara para ocultar la depresión. El problema es que muchas veces quienes padecen este problema no lo reconocen o, si lo hacen, prefieren no admitirlo en público.
¿Cómo sabes si eres alcohólico? Puede que te estés preguntando. Una clave para saberlo es si el alcohol empieza a crearte problemas en tu vida diaria, es decir, si interfiere de alguna manera con tu desempeño normal en el trabajo y en la calidad de las relaciones con tus familiares y amigos.
Si además piensas constantemente en beber, fracasas en tus intentos de no beber más o te encuentras en varias ocasiones bebiendo más de lo planeado, puede que te estés enfrentando con una verdad difícil de afrontar: el alcohol te está controlando.
Carlos, mi amigo, me cuenta que antes de declararse alcohólico, sentía la necesidad de tomar menos y se sentía culpable luego de beber. Luego empezó a notar que su esposa, sus amigos y sus colegas lo cuestionaban y más de uno le llegó a decir que no bebiera más. Es muy común que quienes tienen problemas de alcoholismo ignoren estos cuestionamientos y reaccionen en contra de aquellos que les advierten sobre su consumo de bebidas alcohólicas. Sin embargo, si es tu caso, debes prestarle atención, ya que son estas personas las que muchas veces te ayudan a detectar que tienes un problema de dependencia al alcohol.
Una vez admitido el problema, es urgente buscar ayuda y apoyo en los seres queridos y en especialistas. Hay muchas maneras de evitar que el alcohol afecte tu calidad de vida y te traiga problemas de salud graves. Por eso, que no te de vergüenza admitirlo, es el primer paso para combatir el alcoholismo. Es una enfermedad que se puede tratar.
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