Infórmate sobre la enfermedad de Crohn

Tan sólo en los Estados Unidos, unas 500,000 personas padecen de la enfermedad de Crohn. Hay millones más en el resto del mundo. Esto significa que viven con síntomas de una condición poco clemente que les produce, entre otros malestares, dolor abdominal, diarrea, hemorragias por el recto (que se observa en la ropa interior, al ir al baño, o durante una evacuación), pérdida de peso, fiebre… y otros síntomas que varían de un paciente a otro. Por suerte, hay tratamientos y maneras de sobrellevar la enfermedad. Entérate aquí.

La enfermedad de Crohn es una enfermedad que causa la inflamación del revestimiento del aparato digestivo, que va desde la boca hasta el ano, pero la mayoría de las veces afecta la porción final del intestino delgado llamada íleon, que a su vez se une o se conecta con el comienzo del colon. Al igual que la colitis ulcerosa, otra enfermedad inflamatoria del aparato digestivo, la enfermedad de Crohn puede ser dolorosa y debilitante y, a veces, puede dar lugar a complicaciones potencialmente mortales. Por lo general, se manifiesta en los adultos jóvenes, en su mayoría entre los 15 y los 40 años.

Lamentablemente, no hay cura para esta enfermedad pero con el tratamiento adecuado se puede alcanzar su remisión (cuando la enfermedad no está activa, no da ningún síntoma), incluso a largo plazo.

La Fundación Americana para la Colitis y la Enfermedad de Crohn subraya que, una vez que se diagnostica la enfermedad, el paciente debe conocer y entender bien qué parte del aparato gastrointestinal está afectado y sus implicaciones. Para eso, el diagnóstico completo de la enfermedad es fundamental, pues hay cinco clases diferentes de la Enfermedad de Crohn. Estas son:

Ileocolitis: Es la forma más común de la enfermedad de Crohn y afecta el final del intestino delgado (íleon) y el intestino grueso (colon). Los síntomas incluyen diarrea y dolor (o retortijones) en la parte inferior derecha o media del abdomen. Este tipo de enfermedad suele ir acompañada de una pérdida de peso significativa.
Ileitis: Sus síntomas son los mismos que los de la ileocolitis, pero sólo afecta el íleon. En casos severos, las complicaciones pueden incluir fístulas o abscesos inflamatorios en el cuadrante inferior derecho del abdomen.
Enfermedad de Crohn gastroduodenal: Afecta el estómago y al comienzo del intestino delgado (el duodeno). Sus síntomas incluyen pérdida de apetito, pérdida de peso, náuseas y vómitos y dolor en la parte superior y media del abdomen.
Yeyunoileitis: Este tipo se caracteriza por áreas desiguales de la inflamación en la mitad superior del intestino delgado (o yeyuno). Sus síntomas incluyen un dolor abdominal que puede ir de leve a intenso y dolor intermitente (retortijones) después de las comidas, así como la diarrea. En los casos graves o después de períodos prolongados, se pueden formar fístulas.
Colitis de Crohn: A veces de le llama colitis granulomatosa. Este tipo afecta sólo el colon. Sus síntomas incluyen diarrea, sangrado rectal y abscesos, fístulas o úlceras alrededor del ano. Las lesiones en la piel y los dolores en las articulaciones son más comunes en esta forma de la enfermedad que en otras.

Cómo se diagnostica la enfermedad de Crohn

El examen físico podría revelar sensibilidad y/o la presencia de un masa en el abdomen, un salpullido, inflamación en las articulaciones y/o úlceras en la boca. Además, existen una serie de pruebas que ayudan a determinar qué tipo de enfermedad de Crohn afecta al paciente. Entre estas se encuentran las siguientes:

Colonoscopía o sigmoidoscopía (un tubo pequeño con una cámara y una luz en el extremo se inserta en el recto para que el médico pueda observar el interior del intestino grueso). Durante la colonoscopía se toma una biopsia.
Biopsia (se extirpa una pequeña muestra de tejido del revestimiento del intestino para estudiarla bajo el microscopio en busca de signos de inflamación. Sirve para confirmar la enfermedad de Crohn o descartar otras enfermedades).
Un examen del tránsito esofagogastroduodenal (El paciente bebe una solución de bario, que es un medio de contraste. Luego se toman radiografías. A medida que el líquido pasa por el esófago, el estómago y los intestinos, traza el contorno de los mismos en la radiografías. Este estudio puede ayudar a detectar áreas del intestino más estrechas, a mostrar úlceras y alteraciones en el intestino que en algunos casos podrían ser fístulas).
Tomografía computarizada (TC) del abdomen.
Resonancia magnética (RM) del abdomen.
Endoscopía
Análisis de sangre para contar los glóbulos blancos u otros signos de inflamación en el cuerpo, o para determinar si el paciente sufre de anemia.

Además, el médico podría solicitar un coprocultivo (un examen de las heces fecales) para descartar otras posibles causas de los síntomas.

El tratamiento

El tratamiento de la enfermedad de Crohn se tiene que individualizar. No hay uno que funciona para todos. En la mayoría de los casos se utilizan medicamentos y ocasionalmente se requiere cirugía. La idea es reducir la inflamación. Existen varios medicamentos con efectos antiinflamatorios como la azulfidina; la mesalamina y los corticoesteroides, (prednisona y metilprednisolona). También se pueden usar inmunodepresores, como la mercaptopurina, la azatioprina, el adalimumab, el infliximab, la ciclosporina y el metotrexato. Además de los antibióticos como el metronidazol y la ciprofloxacina que se pueden recetar cuando hay infecciones asociadas (fístulas o abscesos, por ejemplo).Todos tienen sus indicaciones, sus ventajas y desventajas y sus posibles efectos secundarios.

En los casos más avanzados o complicados de la enfermedad de Crohn, puede recomendarse la cirugía. La cirugía de emergencia es necesaria cuando se presentan complicaciones, como una perforación del intestino, una obstrucción (bloqueo) del intestino o una hemorragia considerable. Menos urgentes, pero que también pueden requerir cirugía, son los casos en los que se forman abscesos, fístulas (comunicaciones anormales del intestino), enfermedad anal grave o persistencia de la enfermedad a pesar del tratamiento adecuado con medicamentos.

No todos los pacientes que tienen estas complicaciones necesitan cirugía. La consulta con el gastroenterólogo y el cirujano del colon y recto ayuda a tomar la mejor decisión.

Lo que puede esperarse con los tratamientos

Según la Fundación Americana para la Colitis y Enfermedad de Crohn, con el tratamiento inmediato tras el diagnóstico, el paciente puede amortiguar los síntomas. Pero como la enfermedad de Crohn puede ocurrir en varias áreas del tracto gastrointestinal la gravedad de la enfermedad y sus síntomas pueden variar ampliamente con el tiempo. Tras el tratamiento médico y/o una cirugía, estas son unas cifras que la fundación ha reportado:

El 45% de las personas en remisión se mantendrá libre de recaída durante el próximo año
Un 35% de los pacientes tendrá una o dos recaídas
El 11% tendrá la enfermedad crónicamente activa
Para un paciente en remisión, las tasas de recaída en uno, dos, cinco y diez años se estiman en un 20%, un 40%, un 67% y un 76%, respectivamente.

Como sobrellevar la enfermedad de Crohn

Hay medidas prácticas que se pueden tomar para hacer más llevadera la vida con la enfermedad de Crohn. Lo más importante es mantener una actitud positiva. ¡Como siempre, el poder de la mente es una magnífica medicina!

Con una actitud positiva y medidas preventivas, quienes padecen de esta enfermedad pueden llevar una vida productiva. Si padeces de la enfermedad de Crohn, ten en cuenta lo siguiente:

Lleva un diario de lo que comes, para identificar qué clase de comidas son las que agravan tus síntomas.
Busca apoyo. Este puede venir a través de una terapia sicológica o un grupo de apoyo con otros pacientes que también padecen de la enfermedad de Crohn.
¡Relájate! Sé que no es fácil, pero busca actividades que te ayuden a lograrlo: ejercicios de respiración, yoga, caminatas al aire libre, tu pasatiempo favorito…
Come porciones más pequeñas, más frecuentemente. Esto ayuda a tu organismo a procesar mejor los alimentos.
Toma los medicamentos de manera rigurosa. Con la enfermedad de Crohn no se puede jugar ni estar distraído. Si suspendes tus medicinas puedes sufrir una recaída.
Realiza ejercicios que fortalezcan los huesos, pues la mayoría de los medicamentos para la enfermedad de Crohn los debilita.
Usa un enjuague bucal para evitar las inflamaciones orales y esas dolorosas llagas que salen en la boca.
Haz del agua tu mejor aliado. ¡Es vital que te mantengas hidratado todo el tiempo!
Investiga qué alimentos son los que empeoran la enfermedad y evítalos. También averigua cuáles son los mejores para ti, y tenlos siempre en casa.

Recuerda que cada día es una nueva batalla, y muchos la están librando al igual que tú. En Estados Unidos hay varios ejemplos de celebridades como la presentadora de ABC Cynthia McFadden, el mariscal de campo (quaterback) de los Jaguars, David Garrad y el guitarrista de Pearl Jam, Mike McCready, que viven con la enfermedad de Crohn han triunfado y están realizando sus sueños ¡Tú puedes triunfar y realizar tus sueños también!