- La epigenética busca estudiar cómo es posible que el ambiente pueda influir en la forma en que los genes se leen al producir proteínas. Esto significa que hay modificaciones alrededor de los genes que ‘prenden’ o ‘apagan’ genes en momentos específicos. Esto explica por qué cada célula del cuerpo funciona distinto, aunque compartan el mismo ADN.
- La epigenética, o el control de los genes mediante ‘llaves’ químicas, puede ser la explicación a que dos gemelos con el mismo ADN puedan verse diferente y tener personalidades opuestas. Principalmente se debe a alteraciones a lo largo de la vida, que llevan a producir las proteínas de forma distinta.
- La epigenética es la explicación a muchas de las características que posee el cáncer y las enfermedades autoinmunes. Principalmente porque el control de los genes, la epigenética, está desorganizado. Esto lleva a producir proteínas en momentos incorrectos, e incluso no poder producir otras que son anticáncer, todo porque se ‘cierra con llave’ los genes por el control epigenético.
¿Te has preguntado por qué hay personas que llegan a la vejez con una muy buena salud, mientras que otras se enfrentan a problemas médicos constantemente? La respuesta está, literalmente, por encima de los genes: en la epi (encima) genética. Esta rama de la biología ha descubierto que ciertos cambios químicos fuera de los genes pueden alterar la forma en la que se utilizan. Un ejemplo son los gemelos, que, aunque tienen el mismo genoma se ven y actúan diferente por su epigenética. En este artículo navegaremos este mundo, que puede ayudar a curar enfermedades como el cáncer o las autoinmunes.
La genética no es todo
Como hemos antes en los artículos sobre biotecnología, CRISPR-CAS9, el ARN y los transgénicos; el ADN se compone de genes que cada uno es una instrucción para producir un tipo de proteína, las que son clave para todos los procesos de las células.
Aunque la genética claramente permite explicar la mayoría de lo que sucede en los seres vivos, hay dos incógnitas que por años no había sido posible explicarlas:
- Por qué los gemelos con el paso de los años se ven diferentes y nacen con personalidades, en muchos casos, opuestas.
- Muchos procesos del cáncer no se pueden explicar solo por los genes. Además, algunos tipos de cáncer que no tienen alteraciones genéticas evidentes.
Se pensaba que el ADN determinaba los rasgos de un organismo, “pero esto ya no se cumple, porque sabemos que en cada célula la información generada es diferente […] aunque todas tengan el mismo ADN”, señalaba el experto mundial en epigenética, Dr. Manel Esteller en su discurso de admisión como miembro de la Real Academia Europea de Doctores. Debe haber un control por encima de la genética: la epigenética.
Este control ‘por encima’ se menciona así en:
- Sentido figurado, porque significa un control de cómo, cuándo y dónde se lee el material genético para que se produzcan las proteínas. “No queremos que una neurona tenga proteínas de músculo [aunque tiene los genes para hacerlo; todas las células tienen todo]”, apunta el Dr. Esteller.
- Sentido literal, porque el control puede ocurrir en el mismo ADN o donde este se enrolla (cual carrete de hilo, vea la foto acá) para que pueda caber dentro de la célula; las llamadas histonas. Esto se hace mediante ‘llaves’ químicas que ‘cierran’ zonas del ADN.
Entonces, si se agregan estas ‘llaves’ podemos permitir que se activen o desactiven ciertos genes. Esto hace posible que con el mismo ‘manual completo’ cada célula lee y usa solo lo que le debe interesar. Además de explicar cómo con el mismo genoma, dos gemelos van a hacer sus proteínas de forma diferente, alterando como se ven y comportan.
Por lo que, si los genes son un plano de un edificio, a medida que se construye podemos hacer pequeños cambios en el camino para agregar, quitar, o cambiar el orden según lo que vaya sucediendo en la construcción. La epigenética permite alterar, principalmente con los procesos ambientales, la forma en la que se generan las proteínas.
La epigenética en las enfermedades
“El lupus, por ejemplo, es una enfermedad donde el sistema inmune ataca sus propias proteínas, ya que no se hacen como deberían; se ha perdido el freno puesto por la epigenética en una persona sana”, apunta el Dr. Esteller, quien también ha estado muy implicado en investigar cómo la epigenética propicia el cáncer:
- La epigenética asegura que los cromosomas (forma que toma el ADN al compactarse con las histonas; nosotros tenemos 46 en cada célula) estructura que toma el ADN, no se rompan. En cáncer, esto falla y se produce daño.
- Sin el control correcto epigenético es muy fácil que se dupliquen zonas que hacen más cancerígena a la célula.
- Por nuestros antepasados neandertales, nos quedan algunos genes considerados ‘parásitos’ que gracias a la epigenética están bloqueados. En el cáncer se despiertan y facilitan la metástasis
- Genes anticáncer propio de cada célula en el cáncer quedan cerrados bajo llave por una hiper activación de la epigenética.
“Lo bueno es que ya tenemos fármacos que pueden devolver a la epigenética anterior. Se usan principalmente en leucemias, linfomas y algunos sarcomas. No las mata, sino que les impide crecer y generar metástasis”, expone el experto.
“El estudio de la epigenética del cáncer ha servido para comprender mejor como cambia la célula, encontrar biomarcadores de la enfermedad que predicen el diagnóstico, así como extenderlo a otras enfermedades tales como las autoinmune o poder dar cuenta que los gemelos son distintos porque su epigenética va cambiando con el ambiente”, continúa el Dr. Esteller. Esto último significa que el efecto de un estilo de vida saludable (dieta, ejercicio, salud mental) tiene un efecto directo en nuestros genes y como se los heredaremos a nuestros hijos.
Por Carlos Diego Ibáñez
© 2023 Hispanic Information and Telecommunications Network, Inc (HITN). All rights reserved.
Imagen: ©Shutterstock / Microgen