- La extracción de leche materna es una gran opción para flexibilizar el proceso de amamantamiento, especialmente si vamos a estar separados del bebé. Para ello es necesario entrenar con antelación para conocer lo que más se adapta a la madre y su hijo.
- Las máquinas de extracción de leche materna no son universales, aunque lo señala en la caja va a variar el acople según el tamaño del pezón. Además, está perfeccionado para funcionar con las reservas de leche por sobre la producción directa.
- Para que la extracción de leche sea óptima es necesario mantener una correcta estimulación en la productividad de leche y estar en un ambiente que sea tranquilo. Para ello es necesario informarnos, practicar y tener paciencia.
En el artículo anterior hablamos sobre las razones para extraer la leche materna y lactar de manera diferida. Además, Macarena Quezada, asesora, experta y fundadora del Club de la lactancia, nos señaló algunos consejos para manipular la leche extraída. En esta segunda parte seguiremos hablando de algunos consejos relacionados con el proceso de la extracción de leche y la lactación diferida. ¡Vamos!
¿Cuáles son algunos de los puntos clave a la hora de extraer la leche?
Aunque los extractores dicen en la caja que tiene un calce universal, nos hemos dado cuenta de que no es así. El factor clave es la medida del pezón: si no es el correcto vamos a sentir dolor o no se extraerá fácilmente la leche. Entonces, medirse el pezón y buscar el extractor con la talla correcta puede hacer la diferencia entre una buena o mala experiencia de extracción. (Macarena ofrece gratuitamente un medidor en su página web)
Posterior a eso, la estimulación y el aspecto emocional juegan un gran rol:
- Debe existir un ritmo de extracción cercano al que habría si se amamantara, así las mamas se mantienen estimuladas y activas.
- El nerviosismo, la incomodidad, o falta de apoyo de nuestra pareja en el proceso hará la extracción muy difícil. Conocernos en estos cambios nos permitirá saber cuándo es el momento idóneo para la extracción.
Finalmente, la leche se almacena para dar rápidamente leche al bebé y se produce de manera directa. Nuestro hijo es capaz de lactar en ambos escenarios mientras que el extractor funciona mucho mejor con la leche almacenada. Si tenemos el plan de dar el pecho y también extraer tenemos dos opciones: dar de mamar y extraer luego de 1 o 2 horas, o, lactar por un pecho y extraernos por el otro.
A la hora de dar el biberón hay que tenerlo en una posición donde tenga que chupar para obtener la leche más que solo le llegue sin hacer nada. Así, el bebé al lactar directamente no se confunda.
En relación a eso, ¿cómo poder hacer la transición a solo lactancia diferida?
Si sabemos que tendremos que generar un desapego o queremos comenzar a lactar de manera diferida, es necesario que previamente se produzca un entrenamiento para adaptar a la madre y el bebé. Hay que recordar que, si estamos lejos de nuestro bebé la estimulación baja, entonces tenemos que conocer nuestros procesos previamente.
A medida que avanza nuestra lactancia vamos a ir produciendo menos cantidad de leche, entonces siempre es mejor ir juntando con tranquilidad unos cuantos litros si así es necesario. En una ventana de 24 horas podemos ir reuniendo leche en el mismo recipiente y luego lo congelarla para tener mi banco de leche como colchón.
En relación al bebé pueden pasar dos cosas: que odie el biberón y cueste mucho cambiar o que lo ame y deje el pecho. Eso nos indica que es mejor probar con antelación que sucederá en el proceso de destete, si no le gusta puede hacernos sufrir mucho. Algo que ayuda al tránsito, especialmente si quieres quedarte con lactancia directa y diferida es usar una tetina en las mamaderas que sea triangular, lo que se parece más a la estructura mamaria por lo que no es tan diferente.
¿Qué falta para reducir los prejuicios sobre la extracción de leche materna?
La información, es muy poco lo que las personas saben de esto y del proceso de lactancia. Muchos pacientes dicen “esto es más importante que el parto y no se nada”. Mientras más información se tenga leyendo y en talleres más empoderadas estaremos en nuestras decisiones.
Lo de no saber el tipo de extractor que utilizar, que les haga heridas, no tener soporte de parte de las marcas es algo que nos falta. Que los envases siempre tengan la talla de pezón que funciona. Además de que no se habla sobre como mantener y manipular la leche que se extrae.
Es muy importante recordar el autocuidado dentro de la maternidad. Ser independientes de nuestros bebés en algunos momentos no está mal. Debo tener un tiempo libre para mí: no necesito llevar a mi hijo al doctor o cuando me voy a pintar las uñas. Extraer la leche es un factor médico, sí, pero además permite una mayor flexibilidad a la hora de lograr una maternidad tranquila y feliz.
Por Carlos Diego Ibáñez
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