Algunas personas deciden partir o triturar su medicina, ya sea porque la pastilla es muy grande y encuentran que les es difícil de tragar o consideran que si la parten podrían ahorrar dinero, ya que sólo tendrían que comprar la mitad cada mes. Sin embargo, esto podría ser peligroso. Antes de tomar esta decisión es importante que le preguntes a tu médico o a tu farmacéutico si lo puedes hacer. Aquí te explico porqué.
El partir o cortar las pastillas no es ideal por varia razones. Entre los problemas que se pueden presentar están los siguientes:
- Hay medicinas que tienen un tiempo de liberación determinado. Esto quiere decir que deben de entrar al cuerpo gradual y continuamente. Por ejemplo, varias medicinas para controlar la hipertensión se toman una vez al día. Si se cortan o se trituran, la medicina se absorbe en un momento, los niveles en la sangre se elevan más, puede causar efectos secundarios y su efecto en las 24 horas no es el esperado. Lo mismo sucede con las pastillas de larga duración y los medicamentos que tienen una combinación de drogas.
- Hay pastillas que tienen una capa entérica, que previene que la medicina se digiera por los jugos gástricos del estómago y se absorba allí. Si se parte o se tritura, no sólo no llega al intestino para absorberse allí, donde debe, sino que puede irritar la boca, la garganta, el esófago y el estómago.
- Si la persona tritura una pastilla, ciertos recubrimientos, o abre una cápsula que no se debería abrir, podría estar expuesta a partículas de la medicina que podrían ser carcinogénicas (potencialmente capaces de causar cáncer), teratogénicas (potencialmente capaces de causar una malformación congénita, de nacimiento) o fetotóxicas (potencialmente capaces de causar un efecto tóxico en el bebé en la matriz). A veces, son alergénicas (pueden provocar una reacción alérgica). Además, su efecto no sería el mismo.
- Hay veces que cuando se cortan las mitades no son iguales, o algunos pedacitos se desmoronan, y el compuesto activo es diferente en cada mitad y la dosis no es exacta en uno o ambos pedazos.
- Si una persona que normalmente corta la pastilla se olvida de cortarla, podría tomar el doble de la dosis.
- La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) recomienda que si tu médico te autoriza cortar tus tabletas, que no cortes todas las pastillas al mismo tiempo para tomarlas después. Es mejor cortar una pastilla y tomar ambas mitades antes de cortar la siguiente tableta. Esto es importante porque una vez que la cortas, la tableta se puede ver afectada por el calor y/o la cantidad de humedad en el ambiente. También dice que él o ella te puede recomendar el mejor método para cortarla. Y, si cambias de una marca de medicina a otra, asegúrate de que la nueva marca de medicina se puede cortar.
Es importante que uses una herramienta adecuada para cortar las pastillas. Existen divisores de pastillas que no son caros. Usar cuchillos o tijeras, etc. no funciona bien porque los pedazos tienden a ser desiguales. Además, es más probable que te lastimes.
Si no puedes cortar o triturar una medicina, hay algunas cosas que puedes hacer para que se te facilite tomar la medicina en pastilla:
- Trata de pasar o tragar la pastilla entera con un bocado de comida para ocultar o disimular la forma, el tamaño, y para que no sientas la pastilla.
- No inclines la cabeza hacia atrás. Eso estira el esófago y te dificulta tragar.
- Si puedes, procura obtener las pastillas en forma de cápsulas, el revestimiento de gelatina ayuda a que la pases o la tragues.
- También puedes preguntar si la medicina está disponible en líquido. A veces es más cara, pero es más sencilla de tragar.
Recuerda, nunca cortes o tritures medicinas sin preguntarle a tu médico o a un farmacéutico antes si lo puedes hacer con esa pastilla (de esa marca) en particular. Podría ser peligroso.
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