¿Sabías que cada año unos 30 niños mueren por envenenamiento por plomo tan solo en los Estados Unidos? Lamentablemente, muchos más sufren de las consecuencias por exponerse a este material tan peligroso. Más de 1 millón de niños en este país tienen síntomas por envenenamiento con pintura con plomo cada año. Imagínate cuantos habrá en el resto del mundo… La buena noticia es que con unas simples medidas preventivas puedes evitar el envenenamiento por el plomo de tu vida y de tu hogar.
El plomo no se ve, no tiene olor y sin embargo, en cantidades excesivas puede perjudicar la salud, especialmente la de los chicos. Pero si sabemos qué hacer, es un riesgo que se puede prevenir en un 100%. Para combatir la amenaza del plomo, varias organizaciones se han unido para lanzar una campaña educativa en los Estados Unidos: la Coalition to End Childhood Lead Poisoning (o Coalición para Acabar con el Envenenamiento por el Plomo en la Infancia), la Agencia para la Protección del Medio Ambiente (EPA por sus siglas en inglés), el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD por sus siglas en inglés) y el Ad Council, con el objetivo de que las familias que viven en casas o edificios construidos antes de 1978, hagan pruebas de plomo en sus hogares y busquen ayuda para eliminarlo de su medio ambiente.
Para poder actuar, combatirlo y sacarlo de tu hogar, lo primero es saber en dónde se esconde el plomo.
¿Dónde está el peligro?
Como el plomo es un metal que se empleó frecuentemente en la fabricación de las pinturas y los materiales de construcción antes de 1978, la fuente más común del envenenamiento por plomo está en las casas y en los edificios antiguos y los que se construyeron antes de ese año. “Los edificios construidos antes de 1978 pueden tener pintura con plomo en sus paredes, ventanas, puertas y en otras superficies”, informa la EPA. El peligro no es pequeño: en EU hay 38 millones de viviendas construidas antes de ese año.
Consulta con un especialista
No se recomienda que tú mismo(a) trates de quitar la pintura con base de plomo de tu hogar. En cada estado y en cada país hay profesionales con experiencia y con el entrenamiento adecuado para hacerlo.
Sin embargo, si hay algún trabajo de reparación, de pintura o de renovación que quieres hacer tú mismo(a), la organización Lead Free Kids (Niños libres de plomo), sugiere que tomes estas medidas:
- Antes de empezar el trabajo, cubre los pisos con láminas de plástico.
- Quita todos los muebles, alfombras, cortinas, alimentos, ropa y otros artículos hasta que finalices la limpieza final.
- Los artículos que no puedas quitar del área de trabajo, envuélvelos de forma segura con láminas de plástico y séllalos con cinta adhesiva.
- Apaga la calefacción central y los sistemas de aire acondicionado. Cubre los conductos de ventilación con láminas de plástico y fíjalas con cinta adhesiva.
- Asegúrate de que todas las ventanas en el área de trabajo permanezcan cerradas. Si alteras la pintura, cuando uses una herramienta manual (como cortar, taladrar o lijar), rocía bastante agua en las superficies con pintura a base de plomo para evitar que el polvo se disemine.
- Rocía la superficie de trabajo con agua para reducir la cantidad de polvo que se genere.
- No uses métodos de renovación que puedan generar grandes cantidades de polvo contaminado con plomo, como: limpieza con soplete; lijado, esmerilado, uso de cepillo de carpintero, o el uso de pistola de aire caliente a temperaturas mayores de 1,100 ºF – (593.3 ºC).
- Mantén a los niños y a las mascotas alejados del área de trabajo.
- Quítate los zapatos antes de abandonar el área de trabajo.
- No hay manera de eliminar el polvo, pero algunos métodos de renovación producen menos polvo que otros, como rociar el área con agua antes de lijar o raspar, por ejemplo.
- El área de trabajo debe limpiarse diariamente para mantenerla lo más limpia posible. Cuando se haya finalizado el trabajo, el área debe limpiarse con métodos especiales de limpieza antes de quitar el plástico que aísla el área de trabajo del resto de la casa. Los métodos de limpieza especiales deben incluir: el uso de una aspiradora HEPA para limpiar los desechos y el polvo, seguido de una buena limpieza y trapeado en húmedo con bastante agua.
- Cuando hayas terminado la limpieza, mira a tu alrededor. No debe haber polvo, fragmentos de pintura ni desechos en el área de trabajo. Si ves polvo, fragmentos de pintura o desechos, vuelve a limpiar bien el área.
Presta atención a la escuela de tus hijos…
El riesgo podría no sólo estar en tu hogar: también podría haber partículas de pintura con plomo en el edificio de la escuela en donde estudian tus pequeños, o en los parques donde juegan…
Para asegurarte que el lugar donde estudian y juegan es seguro, pregúntale al director de la escuela o al representante de la junta escolar, qué medidas han tomado para evitar el envenenamiento por plomo. Algunas preguntas podrían ser:
- ¿Mantienen las instalaciones limpias y libres de polvo?
- ¿Limpian alrededor de las áreas pintadas donde la fricción puede generar polvo, tales como las puertas, las ventanas y los cajones? ¿Limpian estas áreas con una esponja o un trapo húmedo para quitar las partículas de pintura o polvo?
- ¿Limpian con frecuencia los paneles y los mosquiteros de las ventanas así como los grifos para el agua?
- ¿Les recuerdan a los niños que deben lavarse bien las manos?
- ¿Lavan bien los juguetes y los utensilios?
Tú mismo(a) puedes hacer una inspección rápida examinando el estado de la pintura tanto de los exteriores como de los interiores y del área de juegos, así como de los toboganes y de los otros juegos.
¿Por qué es tan nocivo el plomo?
Sólo unas cuantas partículas de polvo provenientes de la pintura a base de plomo son suficientes para envenenar a un niño. Y los efectos pueden durar toda la vida:
- El plomo puede perjudicar a cualquier sitio del cuerpo en donde se deposita, como por ejemplo al torrente sanguíneo. Allí puede alterar a los glóbulos rojos, limitando su capacidad para transportar el oxígeno a los órganos y a los tejidos que lo necesitan, provocando anemia.
- Crea problemas en la absorción del calcio que los huesos necesitan para crecer y desarrollarse fuertes y sanos.
- Puede ocasionar daño permanente al cerebro y al sistema nervioso, lo cual puede llevar a problemas de conducta y de aprendizaje y a un coeficiente de inteligencia más bajo.
- Puede causar problemas auditivos (para escuchar) y de crecimiento más lento.
¿Qué más puedes hacer?
Según la Children’s Enviromental Health Network (La Red de Salud Ambiental de los Niños), los siguientes pasos son fundamentales para que mantengas a tu familia fuera del peligro del envenenamiento por plomo:
- ¡Hazles un examen médico! Es preciso que los niños menores de seis años se hagan exámenes para evaluar el nivel de plomo una vez al año. Consulta a tu médico o pediatra acerca de estos exámenes.
- ¡Revisa tu casa! Llama al departamento de salud o a la empresa que te suministra el agua para averiguar cómo obtener pruebas del plomo en la casa y en el agua.
- Si tu casa fue construida antes de 1978 pinta de nuevo cualquier superficie que esté en malas condiciones. La Agencia de Protección al Ambiente (EPA por sus siglas en inglés) y el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD por sus siglas en inglés) en Estados Unidos te proporcionan servicios profesionales, directrices y equipos para hacer estas pruebas. En otros países existen profesionales que te pueden asesorar. Es importante que tomes las precauciones apropiadas cuando realices las pruebas sobre el plomo o cuando hagas reparaciones en una casa que conserve pintura con plomo, ya que estas actividades pueden ser peligrosas si se realizan de forma inapropiada.
- Mantén tu hogar limpio, sin motas ni astillas de pintura y elimina los juguetes y los muebles viejos que sean pintados.
- Si existe la posibilidad de contaminación por plomo, lava cuidadosamente tu ropa y tus manos.
- Asegúrate de que la comida y los líquidos no se almacenen en objetos de cristal con plomo o cerámica con barniz o vidriado de plomo.
- Sigue una dieta sana. Los alimentos ricos en calcio, hierro y vitamina C (como las verduras, los frutos cítricos y los productos lácteos) pueden reducir la absorción del plomo.
- Si crees que el agua de tu casa contiene plomo, usa solamente agua fría para beber y cocinar y déjala correr por el grifo de 15 a 30 segundos antes de usarla. El plomo no se puede ver, oler o gustar (catar, probar). Y hervir el agua no la libra de él.
¡Mantente informado(a)! Visita sitios informativos en el Internet para enterarte de los peligros del envenenamiento producido por el plomo, las directrices para hacer pruebas que lo detecten así como las leyes nacionales y estatales sobre la exposición a esa sustancia. Recuerda: mientras más conozcas sobre el envenenamiento por el plomo, mejor podrás evitar las consecuencias para tu salud y la salud de tu familia.
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