Claro que amas a tu hijo con todo tu corazón, no importa en qué condiciones haya llegado. Pero el bebé nació con labio leporino, uno de los defectos congénitos más comunes. Y aunque los doctores ya te han hablado de cómo se puede corregir mediante la cirugía, te preguntas cómo se afectará la expresión de su carita, su capacidad de hablar y de comer, su relación con los demás…Aquí te explicamos por qué ocurre, y por qué la cirugía temprana es la mejor solución.
El bebé ya tiene casi un mes y en un par de semanas está programada la cirugía para corregir el labio leporino. O estás embarazada, y mediante la ecografía, el obstetra detectó que la niña que esperas llegará con ese defecto congénito. No te desesperes. No estás sola. Tan solo en los Estados Unidos unos 7,000 bebés presentan labio leporino y/o paladar hendido cada año. Esto tiene solución. Lo más importante es actuar cuanto antes. Los expertos están de acuerdo en que un diagnóstico prenatal acertado, una cirugía realizada lo antes posible y un cuidado bien coordinado entre un equipo de especialistas, son factores vitales para garantizar que los niños que nacen con labio leporino o paladar hendido superen exitosamente el problema.
Según el Dr. Richard Redett, cirujano plástico reconstructivo pediátrico, y codirector de la Clínica Craneofacial y de Paladar Hendido del Centro Infantil Johns Hopkins, la ecografía (o el sonograma) durante el embarazo puede detectar el defecto en la mayoría de los casos. Redett señala que las investigaciones han demostrado que la cirugía temprana ayuda a que el niño pueda desarrollar mejor su capacidad para hablar en el futuro, y que ésta debe efectuarse antes de que el bebé cumpla un año de edad. Después de la cirugía, se recomienda un tratamiento combinado entre especialistas en otorrinolaringología ( de oídos, nariz y garganta), especialistas del habla, ortodontistas y psicólogos pediátricos.
Esto es, a grandes rasgos, lo que proponen los expertos. Vamos ahora a explicarte qué es, por qué ocurre y cómo evitarlo.
¿Qué es, esencialmente, el labio leporino? ¿O el paladar hendido? Ambos son defectos congénitos (de nacimiento) que ocurren cuando el tejido que forma el paladar (o el cielo de la boca), y el labio superior no se unen antes del nacimiento. Lo mismo puede ser un pequeño corte sobre el labio que una ranura mucho más profunda que va desde el labio hasta el paladar y la nariz. El labio leporino a menudo va acompañado del paladar hendido, es decir, con una fisura en el velo del paladar que comunica la boca con la cavidad nasal. Ambos afectan no sólo el aspecto físico del bebé, sino su capacidad de alimentarse y luego, de hablar. También aumentan las posibilidades de tener infecciones en el oído.
¿Sabes por qué ocurren? Por lo general, se deben a problemas genéticos hereditarios, aunque existen otras causas como consumo de drogas o medicamentos durante el embarazo, y contacto con virus o toxinas en ese período.
La cirugía para corregir el labio leporino y/o el paladar hendido se realiza casi siempre entre las 6 semanas y los 9 meses de edad y algunas veces, en casos muy severos, se necesita una segunda operación. El paladar hendido por lo general se cierra durante el primer año de vida. En algunas ocasiones se usa una prótesis (una extensión artificial) temporal para cerrar el paladar, lo que le permite al bebé alimentarse normalmente hasta que se pueda realizar la cirugía.
Coordina visitas con especialistas del habla, dentistas, ortodontistas y otorrinolaringólogos para evitar y/o corregir algunas complicaciones que pueden surgir más adelante en la vida del niño a raíz del labio leporino y/o del paladar hendido: aparición de caries (picaduras en los dientes), desplazamiento de los dientes, problemas de audición (para escuchar), infecciones del oído o dificultades con el habla. Se recomienda la ayuda de un psicoterapeuta (psicólogo) si el niño(a) muestra problemas de autoestima.
Si te preguntas cómo puede evitarse, el doctor Redett recomienda lo siguiente:
- Si planeas un embarazo, toma 400 microgramos de ácido fólico al día (empezando mínimo 3 meses antes de planear el embarazo)
- Evita fumar durante el embarazo, y evita el humo de segunda mano.
- Si tomas algún medicamento, comunícaselo cuanto antes a tu obstetra. Algunas medicinas aumentan el riesgo de sufrir defectos congénitos.
- Si en tu familia o en la de tu esposo hay historial (antecedentes familiares) de labio leporino o paladar hendido, habla con tu médico para que te hagan las pruebas necesarias para detectarlos durante el embarazo.
Ya tienes en tus manos la información para tomar los pasos necesarios relacionados al labio leporino o al paladar hendido. Si te sientes abrumada, busca un grupo de apoyo con padres que han enfrentado un problema similar. Recuerda que no hay problema que tu hijo no pueda superar con la ayuda de un equipo médico adecuado y todo el amor que con seguridad recibirá de ti.
Imagen © iStock / Thania Navarro