- La osteoporosis consiste en debilitamiento de los huesos al perderse su densidad. Esto se debe a la pérdida de calcio o a que no se consume el suficiente en la dieta. El ejercicio, el calcio y la vitamina D son claves para que los huesos se mantengan sanos y no se fracturen.
- La osteoporosis generalmente se trata con medicamentos, dieta rica en calcio y vitamina D, además de ejercicio, pero actualmente se ha observado el rol clave que tiene la microbiota intestinal. Principalmente porque ayuda en la absorción de los nutrientes, la inflamación corporal y el proceso hormonal. Lo que ha generado el debate de si el uso de prebióticos y probióticos también podrían ayudar.
- La microbiota en el cuerpo ayuda a mantener a raya a patógenos, mejorar los procesos corporales, especialmente desde el intestino. En este órgano, la microbiota es capaz de regular el funcionamiento del sistema nervioso mediante el nervio vago. Es por esto por lo que en la osteoporosis se plantea que un cuidado de la microbiota no solo ayudaría al funcionamiento general del cuerpo, sino también a mantener, junto con la dieta y el ejercicio, un fortalecimiento de los huesos, retrasando la osteoporosis.
La osteoporosis es una enfermedad comúnmente relacionada con la edad. El debilitamiento óseo asociado con la baja densidad del hueso lleva a un mayor riesgo de fracturas. La forma de prevenirlo es similar al tratamiento: una dieta balanceada rica en calcio, vitamina D y ejercicio regular. Aunque está probado que estos factores son cruciales y necesarios, actualmente está considerándose el rol de nuestra microbiota intestinal. En este artículo, a propósito del Día Internacional de la Osteoporosis (20 de octubre), te hablaremos de como la microbiota puede estar más relacionada con los huesos de lo que pensamos.
Otra vez la microbiota
Los microorganismos que viven junto a nosotros en todo el cuerpo cumplen roles claves. Por ejemplo, en nuestra piel impide la colonización de patógenos. Pero, en nuestro sistema digestivo sus roles son más amplios:
- Protección inmune: La microbiota ayuda a detener y controlar microorganismos que puedan afectar el funcionamiento corporal.
- Inflamación: Interactúa con el sistema nervioso mediante el nervio vago; encargado de los movimientos digestivos. Por lo que se cree que también podría regular procesos inflamatorios intestinales e incluso reducir la inflamación general.
- Absorción de nutrientes: Digiere algunos alimentos que el intestino no puede, liberando más nutrientes. Además, la microbiota produce ciertas señales que permiten activar procesos de absorción intestinal.
- Aportan nutrientes: Los ácidos grasos de cadena corta (SCFA, por sus siglas en inglés) son producidos por algunas bacterias de la microbiota al digerir la fibra de los alimentos. Estos tienen un impacto positivo en la salud de las células a lo largo de todo el cuerpo; huesos incluidos.
En este artículo te contamos como puedes cuidar a tu microbiota.
Debilitamiento de la osteoporosis
Para el Dr. Richard Eastell, experto en Metabolismo Óseo del Reino Unido, la osteoporosis consiste en un desorden de la forma en que se absorben y mantienen los componentes del hueso. “Se caracteriza por una baja densidad ósea y deterioro microscópico del tejido del hueso”, apunta el profesional.
El debilitamiento óseo se produce a lo largo de los años, generando eventualmente fracturas. Es por esto que se asocia con la tercera edad, especialmente persistente en las mujeres. Para la Dra. Pauline Camacho del Centro Medico Universitario Loyola, en Illinois, es importante seguir la historia clínica y realizarse exámenes físicos regulares, especialmente las mujeres, para reconocer factores de riesgo o baja densidad ósea. “Actualmente existe mucho apoyo desde la Inteligencia Artificial para predecir si en 10 años se producirá una fractura importantes”, agrega.
El tratamiento actual busca que se recupere el tejido óseo con medicamentos y tratamientos kinesiológicos. Pero el mejor tratamiento es la prevención a lo largo de nuestra vida:
- Calcio. No necesariamente lo debemos obtener de la leche de vaca; hay muchos vegetales y carnes que nos pueden aportar la cantidad correcta de este mineral.
- Vitamina D. La gran vitamina que viene desde el sol es importante para mantener y absorber el calcio en los huesos. Hay muchos alimentos que también son ricos en calcio que debemos tener en nuestra dieta.
- Ejercicio. Los huesos, al igual que los músculos, necesitan constantemente ser activados para mantenerse sanos. Por eso el ejercicio es clave, no solo para la salud ósea, para de todo el cuerpo.
Nueva visión: la microbiota
Con todo lo anterior, se ha visto que la microbiota intestinal es muy importante para este equilibrio óseo; al desbalancearse (disbiosis, pérdida de la microbiota) aumenta el peligro de que se produzca la osteoporosis, al bajar la densidad ósea. Algunas razones son:
- La microbiota, específicamente ciertos microorganismos, permiten en ratones la producción de células encargadas de estimular la construcción ósea.
- La producción de estrógeno, hormona femenina, es afectada por la microbiota. El estrógeno está relacionado con la formación de hueso, razón por lo que las mujeres postmenopáusicas tienen menor densidad ósea al tener menos estrógeno.
- La absorción del calcio y Vitamina D, junto a otros nutrientes importantes para el hueso, está involucrado a la microbiota.
- La inflamación es un causante de que la osteoporosis se vea acelerada; una microbiota desregulada puede aumentar la inflación general del cuerpo.
Por estas razones se está acumulando más evidencia que junto con los tratamientos convencionales (medicamentos, dieta y ejercicio) el uso de probióticos (microorganismos que complementan nuestra microbiota) y prebióticos (alimentos que son digeridos por la microbiota para que esté saludable) podrían tener un efecto positivo en aumentar la densidad ósea en pacientes con osteoporosis y quizá reducir el riesgo de fracturas.
Por Carlos Diego Ibáñez
© 2023 Hispanic Information and Telecommunications Network, Inc (HITN). All rights reserved.
Imagen: ©Shutterstock / Tatjana Baibakova