En el párpado caído (ptosis o blefaroptosis), el párpado superior baja a una posición que puede llegar a cubrir parte de la pupila e interferir con la visión. La condición puede ser congénita o desarrollarse lentamente como consecuencia del envejecimiento. Generalmente no es grave. Pero si llegara a suceder en unos cuantos días, podría ser signo de una condición grave de los músculos, los nervios, el cerebro o la órbita de los ojos, como miastenia gravis, distrofia muscular oculofaríngea, accidente cerebrovascular (ACV), tumor o aneurisma cerebral, o complicaciones de la diabetes.
El párpado caído normalmente se corrige mediante una cirugía plástica correctiva muy sencilla. Es un procedimiento ambulatorio (no requiere hospitalización) con anestesia local.
Si la ptosis ocurre repentinamente, está acompañada de visión doble, debilidad de los músculos faciales o de los brazos o las piernas, dificultad para tragar, dolor de cabeza intenso, dolor y enrojecimiento de los ojos, fiebre, u ojos saltones, llama a tu médico inmediatamente. Es una emergencia.
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