La conexión entre la depresión, la enfermedad de Parkinson y el suicidio
El mundo ha perdido no sólo a un comediante, a un actor, ha perdido a una persona maravillosa. En las palabras de su publicista: “Robin pasó gran parte de su vida ayudando a otros. Ya sea divirtiendo a millones de personas a través de sus películas, en la televisión o en el teatro; o a nuestras tropas en el frente o consolando a niños enfermos – Robin quería que riéramos y que tuviéramos menos miedo”. La admiración y el cariño del público demuestra que millones de personas recibieron lo que nos brindó. Además de este gran legado, su esposa y tres hijos, quedan sus películas y las memorias de las alegrías que compartió con muchísimas persona (varias con discapacidades y problemas personales con los que siguen lidiando).
Su muerte prematura a los 63 años debida al suicido causado por depresión (enfermedad que había sufrido durante varios años), fue precipitada por el diagnóstico reciente de la enfermedad de Parkinson en etapas iniciales que dio a conocer su esposa, Susan Schneider, después de su muerte.
El fallecimiento de este talentoso comediante y actor puede ayudar a crear consciencia acerca de dos problemas médicos. La depresión y la enfermedad de Parkinson. Aunque Robin Williams había hablado públicamente de que sufría de depresión previamente no había mencionado el Parkinson. También había compartido que tenia problemas con abuso del alcohol y había estado en tratamiento para eso. Pero, según su esposa, llevaba un tiempo de sobriedad.
En un estudio publicado el año pasado se encontró que las personas diagnosticadas con depresión triplicaban sus posibilidades de desarrollar la enfermedad de Parkinson. De acuerdo a los expertos, los químicos en la enfermedad del Parkinson, están íntimamente involucrados con el control de las emociones. Debido a eso, de acuerdo a la Fundación Nacional de Parkinson en Estados Unidos más de la mitad de las personas con Parkinson padecen de depresión clínica y deben ser evaluados y recibir tratamiento para la depresión, si lo requieren. De hecho, el Instituto de Salud Mental menciona que ambas enfermedades pueden hacer que los síntomas de la otra se empeoren. De acuerdo a un estudio realizado por la Fundación Nacional de Parkinson en 2012, el 61% de 5,557 pacientes encuestados reportaron que sufrían de depresión de ligera a severa. Los Institutos Nacionales de Salud (NIH por sus siglas en inglés) mencionan que existe una asociación entre la depresión y el Parkinson, y que la asociación puede no siempre ser biológica. Señalan que el Parkinson causan la muerte de ciertas células en le cerebro, que es más común en los hombres y que ocurra después de los 50 años. No hay cura en este momento para la enfermedad de Parkinson, pero hay medicinas y terapias que mejoran los síntomas.
De acuerdo a el Dr. Jeffrey Lieberman, presidente de la Asociación Americana de Psiquiatría en el pasado y presidente del Instituto Psiquiátrico del Estado de Nueva York, el Parkinson, que frecuentemente lleva a la depresión, puede aumentar el riesgo de suicidio. Williams ya tenía un riesgo de suicidio mayor por sus antecedentes de depresión y de abuso del alcohol, así como por su grupo demográfico. Los hombres blancos mayores, especialmente los que han tenido cirugía del corazón, como Williams, están en mayor riesgo. Y la enfermedad de Parkinson es otro factor de riesgo tanto psicológicamente como fisiológicamente.
Se calcula que 350 millones de personas sufren de depresión en el mundo y que es la causa principal de discapacidad. Puede afectar a las personas a cualquier edad, es más común en las mujeres y en los casos más serios puede llevar al suicidio. Sin embargo, existen tratamientos que pueden ser muy efectivos.
En cuanto a la enfermedad de Parkinson se calcula que alrededor de 10 millones de personas la padecen a nivel mundial, un millón de personas la padecen sólo en EEUU y se diagnostican entre 50,000 y 60,000 personas cada año en este país.
Si crees que podrías estar sufriendo de depresión busca ayuda profesional. Si estás preocupado por un amigo o un familiar y piensas que podría estar deprimido, habla con él. El informarse acerca de los signos y síntomas de la depresión es el primer paso. El buscar ayuda profesional es muy importante. La depresión tiene tratamiento y el tratamiento puede salvar vidas. Puedes obtener más información acerca de la depresión. Si vives en Estados Unidos y necesitas ayuda inmediata, puedes llamar gratuitamente a la línea nacional para la prevención de suicidio al (800)273-8255 #2.
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