Te olvidaste de tomar la píldora por dos días y sabes que pronto se alterará tu período nuevamente. Estás cansada de esta situación pero no sabes qué más hacer y no conoces otras opciones. ¡Buenas noticias! Existen otros métodos anticonceptivos hormonales para elegir: parches, inyecciones, implantes, anillos… En Vida y Salud te contamos cuáles son y cómo funcionan.
Los métodos anticonceptivos hormonales proporcionan hormonas (estrógenos y progesterona) similares a los que normalmente produce tu cuerpo, pero en cantidades o combinaciones diferentes para evitar que ovules, también pueden cambiar el revestimiento del útero y/o aumentar el grosor del moco cervical para impedir que los espermatozoides viajen hasta tu matriz.
Las píldoras anticonceptivas son un método hormonal, aunque no son las únicas. Existen otros métodos que cumplen con el mismo objetivo, pero que se usan de manera diferente.
Si lo que te molesta de las píldoras es que debes tomarlas a diario, otros métodos pueden ser mejores para ti. Pero ten en cuenta que las hormonas tienden a causar efectos secundarios similares independientemente del método por el que se administren. Estos efectos pueden incluir: náuseas, dolor de cabeza, sensibilidad en los senos, aumento de peso (5 libras en promedio), cambios en tu estado de ánimo, depresión, formación de coágulos de sangre en las venas de las piernas (que ocurre muy rara vez, especialmente en fumadoras), etc.
Ortho-Evra: parche anticonceptivo
¿Has escuchado a alguna amiga hablar de “el parche”? Es un parche que se pone sobre la piel para que el cuerpo absorba las hormonas (estrógenos y progestina). Ortho-Evra es la única marca aprobada que se vende en Estados Unidos. El parche puede ser muy sencillo de utilizar pues sólo debes cambiarlo 1 vez a la semana, es pequeño (aprox. 1.75 pulgadas de cada lado – 4.5 cms. -), se puede poner en cualquier parte del cuerpo y te los puedes poner y quitar sola sin necesidad de ir al doctor. Se utiliza 3 semanas de cada mes. Obviamente, debes visitar a tu ginecólogo antes de decidirte si los parches te convienen, y para que te de una receta médica que te permita comprarlos.
Nuva Ring: Anillo vaginal
Es un anillo plástico cargado de hormonas que se ubica en la parte superior de tu vagina. Aunque te lo debe recetar tu ginecólogo, es bastante sencillo de usar y hasta tú misma te lo puedes poner. A diferencia del parche, el anillo se pone una vez al mes y dura 21 días (3 semanas exactas) dentro de tu vagina. Luego lo extraes y descansas por 7 días antes de reemplazarlo por uno nuevo. Normalmente, 2 o 3 días después de haber extraído el anillo, llegará tu período.
Depro-provera: Inyección anticonceptiva
Si eres de las que prefiere los métodos más duraderos para dejar de preocuparte cada mes, te gustará la inyección anticonceptiva. También conocida como Depo-Provera, es una inyección de acetato de medroxiprogesterona de depósito (DMPA), algo parecido a la progesterona y que también evita que ovules. A diferencia de los métodos anteriores, su efecto dura 3 meses y te la debe inyectar tu médico en el brazo o en la nalga.
La inyección es una buena alternativa para las mujeres que no pueden tomar pastillas anticonceptivas o usar un dispositivo intrauterino, y tiende a ser más efectiva que otros métodos. Pero sus efectos no siempre son agradables pues con frecuencia causa sangrados irregulares o la desaparición del sangrado. Además, al suspender la inyección, podrías tardar más tiempo recuperando tu fertilidad (alrededor de 10 meses). Así que si quieres quedar embarazada pronto, es mejor que consideres otro método anticonceptivo.
Implanon: Implante anticonceptivo
Es una especie de varita cargada de progestina, que se introduce debajo de la piel de tu brazo, en un procedimiento muy sencillo que tu médico realiza en su consultorio y que dura máximo 15 minutos. El único que se ha aprobado hasta el momento en Estados Unidos es Implanon.
Si te había sorprendido la duración de la inyección, con este implante te puedes olvidar durante un buen tiempo de los métodos anticonceptivos pues dura hasta 3 años. Es ideal para las mujeres que sufren dolores causados por endometriosis, me refiero a cólicos menstruales fuertes (dismenorrea) y/o dolor en la pelvis. Además, el implante anticonceptivo se puede retirar en cualquier momento y recuperas tu fertilidad de inmediato. Pero puede tener efectos secundarios como sangrado irregular o incluso tu sangrado puede desaparecer por completo, pueden formase coágulos de sangre en las venas de las piernas y aumenta el riesgo de quistes en los ovarios, entre otros.
Dispositivo intrauterino (DIU) hormonal
Su nombre prácticamente lo dice todo: es un dispositivo de plástico que se coloca en tu útero y que secreta progestina para evitar que se produzca un embarazo. Este es uno de los métodos más duraderos pues puedes tenerlo hasta por 5 años. Y además tiene la ventaja de que puedes recuperar tu fertilidad tan pronto te lo quiten.
El DIU debe ser insertado o extraído por tu médico. El proceso es un poco doloroso y puedes tener algún sangrado o secreción vaginal durante un mes; pero por otro lado no se siente una vez que lo tienes, no afecta tu período ni tu vida sexual y puedes olvidarte por completo del riesgo de embarazo por un buen tiempo. Entre sus efectos secundarios están que puede parar tus períodos menstruales, se puede infectar, puede perforar la pared del útero o simplemente salirse. Aunque sucede muy raras veces, es importante que hables con tu ginecólogo para que estés enterada y alerta.
Antes de decidirte por algunos de estos métodos, recuerda que lo mejor es consultar con tu ginecólogo. Para que el cambio sea exitoso y puedas seguir cuidando tu salud sexual.
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