El sexo ¿riesgoso para el corazón?

Hay amores que nunca mueren… y otros que matan. Las investigaciones que tratan de determinar las posibles causas de los ataques al corazón sitúan al sexo como una de las causas que puede provocar problemas cardíacos, en especial en personas sedentarias. Aquí te contamos más detalles al respecto y algunas sugerencias para que puedas disfrutar el sexo y cuidar la salud de tu corazón.

¿Qué factores deberías de considerar antes de tu próxima cita? O sea, antes de ponerte de acuerdo con ese galán o esa dama. Además de la coquetería, no es una mala idea tener en cuenta la salud de tu corazón, aunque parezca que no tiene nada que ver con el encuentro. ¿Por qué? Porque si eres sedentario, hasta el sexo puede ponerte en riesgo.

En general, se considera que especialmente a cierta edad, el hacer ejercicio vigoroso puede provocar un ataque cardíaco. Ahora, un estudio reciente publicado en el Journal of the American Medical Association encontró que el ejercicio moderado, como trotar o tener sexo, también aumenta este riesgo.

En particular, los investigadores encontraron que las personas sedentarias tienen casi 3 veces más posibilidades de sufrir un ataque cardíaco durante o inmediatamente después del acto sexual, y este riesgo es aún más cuando se trata de ejercicio moderado.

Esto no significa que el ejercicio o la actividad física sea perjudicial. Por el contrario, los beneficios de mantener una rutina de ejercicio son conocidos y no se niegan. Por eso, los investigadores mencionan la importancia de balancear estos hallazgos con otros que demuestran que la actividad física regular reduce el riesgo de sufrir ataques cardíacos y muerte cardíaca repentina o súbita.

Lo que este estudio destaca es la importancia de comenzar a practicar una rutina de ejercicios poco a poco y cuidadosamente, primero con actividades suaves y ligeras que puedes ir incrementando lentamente, e ir aumentando a medida que vayas notando los logros de tu cuerpo, especialmente si no estás acostumbrado a hacer ejercicio.

La mayoría de los ataques cardíacos o infartos ocurren cuando un coágulo de sangre en las arterias coronarias (que son las que irrigan al corazón) impiden el paso de la sangre (al obstruirlas) y con ello, el oxígeno. A veces también se asocia con irregularidad en los latidos del corazón (lo que se conoce como arritmia). Ambas cosas pueden disminuir la eficiencia en el bombeo del corazón (que expulsa la sangre hacia el cuerpo y los pulmones).

El síntoma más típico de un ataque cardíaco es un dolor o presión fuerte y prolongado en el pecho, que puede extenderse a los brazos, cuello, espalda y mandíbula (generalmente del lado izquierdo), que puede durar entre 30 minutos y varias horas. El descansar o cambiar de posición no mejora el dolor.

Otros síntomas que se presentan durante un ataque al corazón son: falta de aire, náuseas, vómitos, mareos y sudoración. En algunos casos, como en los diabéticos o en las personas mayores de 75 años, es posible que los infartos se produzcan sin dolor. En las mujeres los infartos pueden no tener los síntomas típicos. A veces el dolor puede ser en la boca del estómago y, especialmente si se tienen factores de riesgo, es importante sospecharlos.

El hacer ejercicio físico regularmente de acuerdo a lo que te indique tu médico, además de llevar una dieta saludable, son las bases principales que te ayudarán a mantener un corazón sano y fuerte. Nunca es tarde para empezar a cuidarte. El agregar algunos pequeños cambios en tu rutina cotidiana podría ser suficiente. No querrás que algo tan placentero como el sexo, se convierta en un factor de riesgo para tu corazón. ¡Al contrario! Debes disfrutarlo y de hecho, el sexo podría ser algo adicional que te ayude a tener un corazón saludable.