El sangrado menstrual abundante o prolongado, cuyo término médico es menorragia, es un problema común en las mujeres que puede tener varias causas y puede afectar su calidad de vida. El tratamiento depende de la causa. Aquí encontrarás qué lo causa, cómo se diagnostica, cómo se trata y más.
Menorragia significa un sangrado abundante o prolongado. Se puede definir como un periodo que dura más de 7 días o que incluye pasar coágulos grandes.
¿Cuáles son los síntomas del sangrado menstrual prolongado?
Podrían incluir los siguientes:
- Sangrar durante más de una semana.
- Pasar coágulos de sangre grandes.
- Empapar una o más toallas sanitarias o tampones cada hora durante varias horas seguidas.
- Requerir el uso de dos toallas sanitarias o un tampón y una toalla sanitaria para estar protegida durante el día.
- Requerir despertarse para cambiar las toallas sanitarias y/o tampón durante la noche.
- Tener que restringir las actividades diarias debido a la abundancia del sangrado.
- Cansancio o falta de aire por anemia (si el sangrado causa anemia).
Es muy útil que puedas describirle a tu médico y, si es posible, que anotes: cuántas toallas sanitarias y/o tampones usas al día (y, como puede ser diferente del día 1 al 7), que lo anotes y que le dejes saber si te los cambias cuando están ligeramente mojados, moderadamente mojados o empapados, para que tenga una idea de la cantidad de sangrado que tienes.
¿Qué causa la menorragia?
Durante el ciclo menstrual, cuando no se fertiliza un óvulo, el revestimiento del útero (la matriz) se expulsa junto con el óvulo en el sangrado menstrual conocido como periodo menstrual. La menorragia, o el sangrado más abundante de lo normal, puede ocurrir debido a que:
- Existen problemas hormonales que pueden causar la menorragia, como:
- Una falta de equilibrio entre el estrógeno y la progesterona u otras hormonas
- Existen problemas uterinos (de la matriz) que pueden causar la menorragia:
- Los fibromas, unos tumores benignos de la matriz
- El cáncer, un tumor maligno
- Relacionados al embarazo, como aborto espontáneo o embarazo ectópico
- El uso de un dispositivo intrauterino (DIU)
- Existen otras condiciones que pueden causar sangrados abundantes. Por ejemplo:
- Trastornos de la coagulación
- Problemas con la tiroides
- Problemas con los riñones
- Problemas con el hígado
- Cáncer
¿Cómo se diagnostica el sangrado abundante?
Además del examen físico, que incluye un examen pélvico y algunos exámenes de laboratorio que requieren una muestra de sangre, tu médico podría solicitar exámenes para descartar un embarazo y/o infecciones de transmisión sexual (dependiendo de tu edad y tus síntomas).
Otros exámenes que podrían necesitarse, según el caso particular incluyen:
- Un ultrasonido pélvico: Utilizando ondas sonoras es posible obtener una imagen de la matriz, los ovarios y los órganos pélvicos.
- Una histeroscopía: El ginecólogo puede ver el interior de tu matriz insertando un tubo delgado que tiene una luz (endoscopio) en el útero a través de la pequeña abertura del cuello del útero.
- Una biopsia endometrial: Se toma un pedazo del revestimiento de la matriz (llamado endometrio) para verlo bajo el microscopio. Generalmente se hace una histeroscopía o un procedimiento llamado dilatación y curetaje (D&C, por sus siglas en inglés) para poder obtener la biopsia.
- Una sonohisterografía: Se coloca líquido en la matriz a través de un tubo delgado mientras se obtienen imágenes de ultrasonido del útero.
- Un estudio de imágenes por resonancia magnética o IRM (MRI, por sus siglas en inglés). Es un examen que permite visualizar los órganos y las estructuras internas a través de campos magnéticos.
¿Cómo se trata la menorragia?
El tratamiento depende de la causa:
- Cuando se desconoce la causa de y/o la causa es hormonal, se utilizan los siguientes medicamentos:
- Pastillas anticonceptivas. Ayudan a regular los niveles hormonales. Paran la ovulación y los periodos son más ligeros.
- Terapia con progestina. Se utiliza una versión sintética de la hormona progesterona. Se puede dar por 21 días y suspender por 7 o se puede usar un dispositivo intrauterino que la libere (que contenga levonorgestrel). Lo que hace esta hormona es adelgazar el revestimiento uterino, lo que disminuye el sangrado.
- Pastillas anti-inflamatorias no esteroides o AINEs (NSAIDs, por sus siglas en inglés). Como la aspirina o el ibuprofeno. Son inhibidores de las prostaglandinas. Ayudan a coagular la sangre y limitar su flujo. Otro beneficio es que, si tienes dolor durante el periodo, alivian el dolor también.
- Cuando el tratamiento se debe a problemas con el revestimiento de la matriz (endometrio) los tratamientos podrían incluir:
- Ablación. Un procedimiento que consiste en la destrucción del revestimiento de la matriz (el endometrio).
- Resección. En este procedimiento el revestimiento de la matriz (el endometrio) se remueve.
- Histerectomía. Es un procedimiento quirúrgico en el que se remueve toda la matriz.
- Si se debe a fibromas, se podría recomendar quitar los fibromas o, dependiendo de la edad de la mujer y el tamaño de los fibromas, se podría considerar la histerectomía.
Si estás anémica debido a la pérdida de sangre, tu médico podría recomendarte suplementos de hierro.
¿Cuándo debes ir a una sala de emergencias?
Si desarrollas palpitaciones, mareo, sensación de que te vas a desmayar, falta de aire y/o dolor de pecho, además de la menorragia, busca atención médica de emergencia.
El sangrado menstrual abundante o menorragia desatendido puede causar anemia por deficiencia de hierro y, en casos severos, hipovolemia y otras complicaciones. No te esperes. Si tienes síntomas, visita a tu ginecólogo. Él o ella te puede ayudar a encontrar la causa y a tratarla.
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