Por Nancy Neirick, MS. RD
Si tienes diabetes, no tienes que comer ni desabrido, ni tiene que ser aburrido, ni diferente a lo que comen los demás. Sólo tienes que aprender un poco acerca de en qué consiste una alimentación saludable y las cantidades que necesita tu cuerpo y puedes seguir disfrutando la comida.
En Estados Unidos durante el mes de noviembre se celebra el mes nacional de la diabetes. ¿Sabias que casi 30 millones de niños y adultos tienen diabetes sólo en los Estados Unidos? La diabetes le quita la vida a mas personas que el cáncer de la mama y el SIDA combinados. Lo triste es que 1 de cada 4 personas tiene diabetes y no lo sabe.
Entonces… ¿que debemos hacer? Lo primero es comer una dieta saludable. Llevar una alimentación balanceada y nutritiva es muy importante para todos, pero es aún mas crítico para las personas con diabetes.
¿Que es una dieta saludable? Una dieta saludable es una dieta balanceada que incluye carbohidratos, proteínas y grasas saludables. Comer una amplia variedad de estos alimentos nos ayudará a obtener los nutrientes que nuestro cuerpo necesita para mantenerse sano.
Los carbohidratos son nuestra fuente principal de energía. En este grupo se encuentran los frijoles, lentejas, papas, cereales, arroz, tortillas, panes, frutas, leche y yogurt bajo en grasa. Los carbohidratos tienen el impacto mas fuerte en los niveles de azúcar es por eso que los diabéticos tienen que monitorearlos.
Otro nutriente que es súper importante es la proteína. La proteína ayuda a fabricar y a reparar los tejidos de tu cuerpo y ayuda a mantener la pancita llena y contenta. Trata de incluirla diariamente con cada comida. Algunas opciones sanas y ricas incluyen el pescado, el pavo, el pollo, los huevos y la carne roja y magra.
Las grasas se encargan de transportar las vitaminas por todo el cuerpo y mantienen la piel y el cabello saludable. Las grasas suministran un gran número de calorías, es por eso que sólo necesitamos cantidades limitadas.
Las grasas pueden ser buenas como las monoinsaturadas y poliinsaturadas y las que no son saludables, que son las saturadas. Las grasas saturadas son sólidas a la temperatura del ambiente pueden elevar el colesterol. Por eso, hay que tener cuidado con las grasas saturadas. Algunos ejemplos incluyen: la mantequilla, el tocino, el queso en crema, la mayonesa y el aceite de coco y el de palma.
Mis favoritas en el grupo de las grasas buenas son el aceite de oliva, los aguacates y las almendras.
Entonces, ¿cuál podría ser un plato saludable y sabroso que contiene los 3 nutrientes? podría ser un pescadito a la veracruzana salteado en aceite de oliva con unas 2 tortillitas, aguacate y pico de gallo. O unos taquitos de pollo con aguacate, pico de gallo y tantito arroz y frijoles. ¡Que rico!
Nuestras comidas latinas son saludables y ¡deliciosas! El ser diabético no significa que tienes que eliminar alimentos de tu plan de comida, lo que hay que hacer es limitar las cantidades que comes de algunos de ellos.
Comer sano, con o sin diabetes es un reto diario para todo el mundo. Si sigues tu plan de alimentos la mayoría de las veces, te vas a ver y a sentir mucho mejor, vas a controlar tus niveles de azúcar en la sangre y reducirás las complicaciones de la diabetes.
Pon estos consejos en practica hoy y a ¡comer sabroso y saludable!
¡Buen provecho!
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