Aprovechando que octubre es el mes de crear conciencia sobre el cáncer de mama, este artículo te habla sobre los diferentes tipos de cirugía que hay disponibles como parte del tratamiento para el cáncer del seno. Infórmate sobre estas opciones, pero sobretodo, recuerda que la detección temprana a través del auto examen y las visitas frecuentes al médico, salva cada año miles de vidas. ¡No te descuides!
En Vida y Salud siempre he recalcado la importancia de la detección temprana cuando se trata de combatir al cáncer del seno. Como llegó nuevamente octubre, el mes de crear conciencia acerca de este tipo de cáncer, es importante que recordemos el auto examen. Tú más que nadie conoces tus senos, y si encuentras alguna irregularidad, puedes acudir al médico de inmediato para que te examine, aunque como sabes, aunque no notes cambios, la evaluación médica y la mamografía periódica también son indispensables. Ya sabes que mientras más temprano se detecta, hay más opciones de un tratamiento exitoso y de que salgas airosa de esta batalla.
Si acaso te diagnosticaran con cáncer, existen opciones para el tratamiento del cáncer del seno. Estas dependen del tipo de cáncer, el lugar del seno donde se ubica y de la etapa en la que se encuentra. Pero lo más seguro es que la cirugía sea una de las opciones para el tratamiento del cáncer de seno.
Cada caso es distinto, y cada mujer diferente, por eso, aquí te cuento a grandes rasgos de qué se tratan los diferentes tipos de cirugía, pero sólo tú y tu médico podrán decidir cuál es la mejor opción para ti.
- Lumpectomía: también conocida como “cirugía conservadora”, este procedimiento extrae solamente el tumor canceroso y una zona a su alrededor, por seguridad. También es probable que se extraiga algún ganglio axilar. La idea de esta cirugía es conservar (como su nombre lo indica) la apariencia general del seno. Se complementa con tratamiento de radioterapia. No todas las mujeres con cáncer de mama califican para este tipo de cirugía, sobretodo si tienen más de un área cancerosa en el seno.
- Mastectomía parcial: En este tipo de cirugía se quita la masa cancerosa con parte del tejido que está a su alrededor, además de parte del recubrimiento de los músculos del tórax y algunos ganglios linfáticos. En estos casos, la radioterapia frecuentemente se recomienda por seis a ocho semanas una vez que se completa la recuperación de la cirugía.
- Mastectomía total: Como su nombre lo indica, este tipo de intervención quita el seno completo, pero no los ganglios linfáticos, si es que no han sido afectados por el cáncer. Esta cirugía se hace como prevención adicional a la reaparición del cáncer del seno.
- Mastectomía radical modificada: esta cirugía quita el tejido mamario en su totalidad junto con el pezón y los ganglios linfáticos de la axila. Los músculos del pecho o tórax no se tocan. En muchas ocasiones, a las pacientes que son sometidas a esta cirugía se les hace una reconstrucción del seno usando tejido de su abdomen o usando una prótesis mamaria ( una pieza artificial).
Gracias a la tecnología de hoy en día, el impacto emocional de este tipo de cirugías se reduce porque se cuenta con herramientas para reconstruir la apariencia del seno. No te olvides de hablar con tu médico acerca de las diferentes opciones para que tengas la información que necesitas en tu caso particular y, si tienes dudas, pide una segunda opinión de otro oncólogo.
No te desanimes, más bien siéntete feliz de que existe esta posibilidad y de que puedes darle la pelea a esta enfermedad.
© iStockphoto.com / Trista Weibell