- La tuberculosis, una grave enfermedad bacteriana, tenía una alta mortalidad antes del descubrimiento de antibióticos y vacunas. Sin embargo, a consecuencia de la resistencia por parte de las bacterias y de un bajo acceso a los tratamientos, ha vuelto a subir la tasa de fallecidos en nuestra región.
- La infección por tuberculosis está levantado las alarmas de las organizaciones mundiales al verse aumentadas las tasas de contagios, incluyendo las de Latinoamérica. La principal amenaza radica en que muchas veces la enfermedad está latente y no presenta síntomas en la persona afectada, sin embargo si mantiene la capacidad de contagiar.
- Con más de 35 mil muertes en América Latina por tuberculosis es necesario crear políticas públicas e internacionales para poder frenar estas alarmantes cifras. Es por esta razón que se ha incluido dentro de los objetivos de desarrollo sustentable de las Naciones Unidas para erradicarla en 2030.
Aunque pareciera cosa del pasado, la tuberculosis es una enfermedad bastante presente en el planeta, con más de 10 millones de enfermos cada año. Antes de los antibióticos, contagiarse de tuberculosis era prácticamente una sentencia de muerte. Ahora está mucho más controlada, sin embargo, con la falta de control y la presencia de bacterias resistentes a antibióticos la Organización Panamericana de la Salud ha puesto en 2022 a la tuberculosis como la segunda enfermedad infecciosa en el número de muertes. En este artículo te hablaremos de la situación e intentaremos explicar sus causas.
La tuberculosis, una bacteria compleja
En la ciudad de Chicago se produjo un foco de tuberculosis (TB) hace unas semanas en albergues de migrantes. Las autoridades del estado de Illinois no han numerado las personas afectadas, pero el portavoz del departamento de salud señaló que esta enfermedad tiene focos en la ciudad todos los años. Lo que muestra su presencia constante en este país.
La tuberculosis es causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis la cuál tiene gran habilidad para movilizarse a los pulmones y otros órganos consumiéndolos lentamente (como lo muestran momias egipcias con daño en la columna por TB). Históricamente, se le ha llamado como la peste blanca o tisis (‘tísico’ es la forma en que se le llama a las personas muy enfermas por diversas causas en algunas regiones de Latinoamérica), al ser prácticamente una sentencia de muerte.
Sus síntomas son muy conocidos:
- Al inicio hay fiebre baja, cansancio y tos leve.
- Tos, que eventualmente libera flema con sangre
- Sudoraciones nocturnas y fiebres altas
- La capa externa del pulmón, la pleura, tienen líquidos para lubricar el movimiento respiratorio. En la TB es común que se llene de mucho líquido impidiendo la respiración, lo que se conoce como derrame pleural.
“El gran desafío de nuestros países de Latinoamérica es que en muchos casos la bacteria de la tuberculosis no presenta síntomas, más bien está en un estado latente. Por lo que, si no tenemos los recursos necesarios para examinar las poblaciones es muy fácil que se produzcan más casos”, apunta la Dra. Agueda Muñoz del Carpio, médica e investigadora en salud pública en la Universidad Católica de Santa María de Arequipa, Perú. El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos estima que 13 millones de personas en el país tienen TB latente.
Por otro lado, la bacteria ha tenido una alta capacidad para presentar resistencia a los antibióticos, produciendo en la región, incluida Estados Unidos, un gran peso y desafío para las políticas públicas en el control de la enfermedad. “Convirtiéndola en una crisis de salud y amenaza para la seguridad sanitaria”, en palabras de la OMS. Por eso es clave también realizar jornadas de vacunación en zonas afectadas.
Latinoamérica es una de las más afectadas
En 2022 cada día 850 personas se contagiaban todos los días, y de ellas 90 morían por esta causa en Latinoamérica. Las principales causas para la Dra. Muñoz son la pobreza, que fuerza a las personas a vivir en espacios reducidos, aumentando el riesgo de contagio (al transmitirse por el aire luego de mucho tiempo en contacto) y un menor acceso a la salud, en relación a diagnosticar y prevenir con vacunas. Además, esto se agrega a las personas que viven en zonas rurales sin acceso a infraestructura médica, lo que puede permitir un desarrollo de la enfermedad sin tratarla.
Por otro lado, la TB afecta de sobremanera a aquellos que se encuentran inmunodeprimidos, como es el caso de los pacientes con VIH/SIDA. Considerando que en sí mismo este último es una crisis de salud pública en nuestra región, que se contagien de TB sin saberlo, aumenta el riesgo de muerte (se contabilizan que un tercio de los fallecidos, 35 mil en 2022, fue por coinfección de TB-VIH).
Algunos países que se encuentran especialmente afectados son, en número de fallecidos en 2022:
- Brasil, 11 mil 200
- Perú, 6 mil
- México, 5 mil
- Haití, 2 mil
Además, se estima que sobre 80 mil personas en la región no fueron diagnosticadas ni tratadas de TB.
La eliminación de la TB es un objetivo mundial
Aunque el número mayor de casos de TB (casi el 90%) se concentran en Asia continental y del Pacífico, además de África, nuestra región también se ha incluido en el programa de la OMS para derrotar a la enfermedad en 2030 dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Así hay un compromiso económico para:
- Fortalecer y actualizar las políticas públicas de los distintos países en lo que se refiere al TB
- Producir campañas de testeo para así lograr encontrar casos de TB latente
- Diagnosticar y tratar en localidades alejadas a pacientes con TB
- Apoyar en la investigación de medicamentos para lograr eliminar al TB resistente a los antibióticos, incluidas nuevas vacunas.
Por Carlos Diego Ibáñez
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