Los tumores del canal medular son una condición poco frecuente pero compleja, que afecta el sistema nervioso central debido a su cercanía a la médula espinal. Estas formaciones pueden ser benignas ( no aumentan de tamaño o realizan metástasis) o malignas. Sin embargo, su ubicación sensible dentro del canal espinal presenta desafíos importantes para el diagnóstico, el estilo de vida y el tratamiento.
¿Qué son los tumores del canal medular?
Los tumores del canal medular se desarrollan en o alrededor de la médula espinal, y aunque pueden ser benignos, el crecimiento de cualquier masa en esta región puede impactar la salud debido a la presión sobre la médula y los nervios circundantes. Esto puede llevar a síntomas debilitantes y requerir una intervención quirúrgica precisa.
Tipos de tumores del canal medular
Existen varias formas de tumores medulares, cada una con características y riesgos específicos para la salud. Entre los más comunes se encuentran:
- Tumores benignos: Crecen lentamente y no se diseminan, aunque su tamaño puede causar presión en la médula, provocando dolor y limitación de movimiento.
- Meningiomas: Se desarrollan en las membranas que rodean la médula, la barrera hematoencefálica. Y ocurre con mayor frecuencia en adultos mayores.
- Schwannomas: Afectan las células que recubren los nervios para que la señal viaje rápidamente; aunque benignos, pueden provocar síntomas neurológicos al presionar la médula.
- Hemangiomas: Tumores vasculares que afectan los vasos sanguíneos de la médula, su crecimiento lento permite intervenir quirúrgicamente en casos específicos.
- Tumores malignos: Son más agresivos y con un riesgo de propagación elevado, lo que exige tratamientos más intensivos.
- Gliomas y neuroblastomas espinales: Tumores originados en el tejido nervioso interno de la médula, cuyo carácter canceroso complica el tratamiento y lleva a la pérdida de funciones.
- Sarcomas: Crecen en tejidos de soporte, como huesos y músculos, y tienden a progresar rápidamente.
Causas y factores de riesgo de los tumores espinales
Aunque no se comprenden completamente las causas, ciertos trastornos hereditarios, como la neurofibromatosis tipo 2, pueden aumentar el riesgo de tumores en el sistema nervioso, incluyendo los nervios auditivos. Factores genéticos y anomalías celulares suelen ser indicativos de estas formaciones.
Síntomas de los tumores del canal medular
Los síntomas de los tumores del canal medular dependen de factores como el tamaño y la ubicación del tumor. De acuerdo a la Asociación Americana de Neurocirujanos (AANS), los más comunes:
- Dolor de espalda persistente: Un síntoma inicial frecuente, especialmente en la zona lumbar y torácica.
- Debilidad muscular: La presión del tumor sobre los nervios puede causar pérdida de fuerza y movilidad.
- Entumecimiento o pérdida de sensibilidad: Hormigueo o sensación de frío en extremidades son señales de afectación nerviosa.
- Problemas de coordinación: La compresión de la médula puede llevar a dificultades en la estabilidad y movilidad.
- Pérdida de control de esfínteres: En casos avanzados, puede afectar el control de vejiga o intestinos.
Dado que estos síntomas pueden confundirse con otras afecciones, a menudo el diagnóstico de estos tumores puede demorarse, aumentando el riesgo de daños neurológicos a largo plazo. Por esa razón, es importante el chequeo anual de rutina.
Diagnóstico de los tumores del canal medular
El diagnóstico de los tumores del canal medular requiere una evaluación exhaustiva para confirmar la presencia, tipo y ubicación del tumor. Los métodos diagnósticos incluyen:
- Imágenes por resonancia magnética (IRM): Ofrecen una imagen detallada del tumor y su localización en la médula, y son esenciales para la planificación quirúrgica.
- Tomografía computarizada (TC): Complementa la IRM al mostrar la estructura ósea y el tejido circundante.
- Biopsia: Cuando se sospecha malignidad, se realiza para examinar el tipo de células y planificar el tratamiento adecuado.
Tratamiento para los tumores del canal medular
Las opciones de tratamiento varían en función del tipo de tumor y su ubicación. Los tumores del canal medular benignos y malignos pueden requerir tratamientos diferentes, los cuales incluyen:
- Cirugía tradicional: Indicada especialmente en tumores de gran tamaño; aunque efectiva, implica una recuperación prolongada debido a los extensos cortes quirúrgicos necesarios.
- Radioterapia y quimioterapia: Utilizadas principalmente en tumores malignos, estas opciones pueden ayudar a reducir el tamaño del tumor cuando la cirugía no es posible. Sin embargo, la radioterapia en la médula presenta limitaciones por el riesgo de dañar tejido nervioso saludable.
Innovación: cirugía tubular mínimamente invasiva
Una de las técnicas más avanzadas para el tratamiento de los tumores del canal medular es la cirugía tubular mínimamente invasiva. Esta innovadora técnica, que originalmente era usada para tratamientos de hernias y otras afectaciones óseas, ahora es aplicada en centros médicos de vanguardia como el Hospital de Sant Pau en Barcelona, ha transformado el manejo de estos tumores con beneficios únicos y demuestran su capacidad de ser implementada en otros centros de salud.
- Proceso de la cirugía tubular: Utiliza un tubo rígido de menos de 2 cm de diámetro para acceder al área afectada sin dañar los músculos y tejidos adyacentes, ya que los separa permitiendo que no se tengan que realizar cortes internamente.
- Ventajas significativas: Permite una recuperación más rápida, con menos dolor y menor riesgo de infecciones, gracias a una incisión mínima casi del tamaño del tubo utilizado.
El Dr. Andreas Leidinger, neurocirujano adjunto del Hospital de Sant Pau, explica que esta técnica se adapta bien a casos específicos y seleccionados, donde los pacientes tienen tumores de menor tamaño y localización favorable. Este procedimiento innovador representa un avance significativo en neurocirugía al ofrecer una solución menos invasiva y más segura para tumores de difícil acceso.
Cuidado y recuperación postoperatoria en tumores medulares
La recuperación después de cualquier tipo de cirugía espinal requiere seguimiento continuo y cuidado especializado:
- Fisioterapia: Mantener una rutina de rehabilitación controlada ayuda a restaurar la movilidad y fortalecer el área intervenida.
- Monitoreo neurológico: Es clave para detectar complicaciones a tiempo, especialmente en síntomas de debilidad o entumecimiento.
- Control de recaídas: Para tumores malignos, realizar controles periódicos es esencial para vigilar posibles recurrencias.
FAQs
¿Qué son los tumores del canal medular?
Son masas que crecen dentro o alrededor del canal espinal y pueden ser benignas o malignas. Su ubicación presenta riesgos y desafíos únicos.
¿Cuáles son los síntomas de los tumores medulares?
Incluyen dolor de espalda persistente, debilidad muscular, entumecimiento y problemas de coordinación y control de esfínteres.
¿Cómo se diagnostican estos tumores?
Mediante resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y biopsias en casos de sospecha de malignidad.
¿Qué tratamientos existen para los tumores espinales?
Van desde cirugía tradicional hasta técnicas mínimamente invasivas y tratamientos como radioterapia y quimioterapia.
¿Qué es la cirugía tubular mínimamente invasiva?
Es una técnica que permite acceder al tumor con una incisión mínima, reduciendo complicaciones y tiempo de recuperación.
¿Se puede prevenir la recurrencia de tumores malignos en la médula espinal?
El monitoreo regular y el seguimiento médico son clave para detectar recaídas en etapas tempranas.
Por Carlos Diego Ibáñez
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