Skip to main content

El día 31 de mayo fue seleccionado en 1987 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Día sin Tabaco. Es decir, un día sin nicotina, y sin humo ni de primera ni de segunda mano contaminando tu organismo y el aire que respiran los demás. Hoy, puede ser una excelente oportunidad para que consideres dejar ese hábito tan perjudicial y des un paso gigante en beneficio de tu salud.

¿Fumas? Quizás has tratado de dejar el cigarrillo, pero la costumbre y la dependencia son más fuertes que tu voluntad, a pesar de saber cuánto te perjudica a ti y a los que te rodean. El novelista Mark Twain, (el autor del clásico “Tom Sawyer”), decía con su característico sentido del humor: “Dejar de fumar es fácil. Yo lo he hecho cientos de veces”. Pero el asunto no es una broma. El tabaco es el factor de riesgo principal de muchísimas enfermedades, y se calcula que es responsable de la muerte de uno de cada diez adultos en todo el mundo, como lo indican los datos de la Organización Mundial de la Salud. Según el director general de Salud Pública de los Estados Unidos, dejar de fumar representa el paso más importante que los fumadores pueden dar para vivir más tiempo y mejorar la calidad de sus vidas.

Pero a pesar de todo lo que se conoce y se divulga sobre sus estragos, el tabaquismo sigue siendo muy prevalente. Y eso se debe a la nicotina de los cigarrillos (es tan adictiva como la cocaína), que es lo que te provoca el ansia de fumar.

¿Te animas a dar el paso? Quizás te ayude saber que entre las enfermedades que puede causar el tabaco están varios tipos de cáncer (sobre todo el de los pulmones), condiciones cardíacas, apoplejías, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedades de las encías, problemas en el embarazo y problemas de la vista (como las cataratas).

Cómo dejar de fumar

¿Y cómo lo hago, te preguntarás? No es fácil, pero tampoco imposible. Algunos fumadores pueden dejar el hábito por su cuenta, pero otros necesitan ayuda física, mental o ambas, y en muchos casos se requiere supervisión médica. Para romper el hábito, tu médico puede recomendarte la terapia de reemplazo de nicotina, en forma de parches, goma de mascar, tabletas, atomizador nasal o inhalador. También hay medicamentos que ayudan, disponibles sólo con receta.

Según la Sociedad Americana del Cáncer (American Cancer Society), no existe un método único para dejar de fumar. Pero hay cuatro factores clave para tener éxito:

  1. Tomar la decisión firme de dejar de fumar.
  2. Escoger un día para dejar el cigarrillo y no dejarlo “para mañana”.
  3. Lidiar con los síntomas que se presenten.
  4. Mantenerte firme en tu decisión.

Pero no te descorazones si fracasas en el primer intento. Muchos ex fumadores empezaron varias veces hasta tener éxito. Si no lo logras de momento, vuelve a intentarlo

¿Qué ocurre en tu cuerpo cuando dejas de fumar?

Los beneficios son muchos, tanto a corto como a largo plazo. Fíjate en esta lista y verás lo importante que resulta que dejes de fumar cuanto antes:

  • A los 20 minutos, tu presión arterial y tu pulso vuelven a lo normal.
  • A las 24 horas, tus pulmones empiezan a limpiarse.
  • A los dos días, tu cuerpo está libre de nicotina, y el gusto y el olfato mejoran.
  • A los tres días, puedes respirar más fácilmente y tu energía se incrementa.
  • De dos a 12 semanas, mejora tu circulación.
  • De tres a nueve meses, se mejoran la tos, el jadeo y la respiración.
  • Al año, el riesgo de los ataques cardíacos se reduce a la mitad comparado con los fumadores.
  • A los 10 años, el riesgo de desarrollar un cáncer del pulmón es la mitad comparado con los fumadores.

Aparte de mejorar tu salud, dejar de fumar tiene otros beneficios:

Mejor sexo. Se mejora la circulación de la sangre en todo tu cuerpo, lo que aumenta tu sensibilidad. Los hombres que dejan de fumar tienen mejores erecciones; las mujeres se excitan más fácilmente y tienen mejores orgasmos.

Mayor fertilidad. Se mejora el revestimiento del útero en las mujeres y se hace más potente la esperma de los hombres, por lo que es más fácil lograr un embarazo. También baja la posibilidad de un aborto espontáneo y aumenta la de dar a luz un bebé saludable.

Piel más joven. Se hace más lento el proceso del envejecimiento de la piel. Esta recibe más nutrientes, y desaparece el tono cetrino que a menudo tienen los fumadores.

Dientes más blancos. Tus dientes no se siguen manchando y tu aliento es más fresco. Se reducen las probabilidades de enfermedades de las encías y la pérdida de los dientes.

Mejor respiración. Puedes respirar con más facilidad y toserás menos, porque la capacidad de tus pulmones aumenta en un 10% en unos nueve meses.

Una vida más larga. La mitad de los fumadores mueren a una edad temprana de enfermedades relacionadas con su hábito, incluyendo problemas cardíacos, cáncer del pulmón y bronquitis crónica. Y dejar de fumar no sólo te prolonga la vida, sino que, al mejorar tu salud, te sientes mejor, y tendrás más movilidad y energía en la tercera edad.

Menos estrés. Los estudios han demostrado que los niveles de estrés descienden cuando la persona deja de fumar, al contrario de lo que creen muchos fumadores (creen que fumar las “calma los nervios”). La adicción a la nicotina produce estrés en el período de tiempo entre un cigarrillo y otro. Además, al mejorar los niveles de oxígeno en el cuerpo, los ex fumadores se pueden concentrar mejor, lo que aumenta su bienestar mental.

Gusto y olfato más agudos. A medida que tu cuerpo se recupera de los químicos tóxicos de los cigarrillos, mejoran considerablemente tus sentidos del gusto y el olfato.

Más energía. Entre dos y 12 meses después de dejar de fumar, mejora la circulación. Eso facilita cualquier actividad física, incluyendo caminar y correr. El aumento del oxígeno en el cuerpo hace que te canses menos y tengas menos probabilidad de que te duela la cabeza. También se refuerza el sistema inmunológico, lo que te ayuda a combatir de manera más eficiente los resfriados y las gripes.

Ahorro de dinero. ¡Piensa sólo en lo que te cuestan los paquetes de cigarrillos!

Lo que te acabo de mencionar ¿te ayuda a dejar de fumar? Si no es así, hay una cosa igual de importante: el humo de segunda mano es una amenaza para la salud de tu familia y de tus amigos. Los que están expuestos a él tienen un mayor riesgo de padecer de cáncer pulmonar, de enfermedades cardíacas y de apoplejía. Los niños en particular tienen el doble de riesgo de desarrollar enfermedades pulmonares, como: neumonía, asma, difteria y bronquitis, además de tener más infecciones en los oídos. Además, triplican su riesgo de padecer de cáncer pulmonar más adelante en su vida que los hijos de los que no fuman. Toda la evidencia está en contra del tabaco que en definitiva, no te aporta nada bueno. Deja ya de fumar, no sólo por tu salud, sino también por la salud de tus seres queridos.

Imagen © Shutterstock / Mita Stock Images

 

Comentarios de nuestra comunidad